El Valencia, al más puro estilo Marcelino, consiguió derrotar al Athletic en San Mamés por 0-1. El solitario tanto de Cheryshev terminó siendo decisivo. Recital de Parejo y Coquelin en el mediocampo. Unai Simon mantuvo las esperanzas por el empate hasta el final.
San Mamés abrió sus puertas este sábado para brindarnos todo un clásico de la liga como lo es un Athletic-Valencia, con marcador final de 0-1 para los valencianistas.
Para este encuentro de vital importancia, Garitano volvió a confiar en el bloque que le funcionó ante el Alavés el pasado domingo, incluido Unai Simón, suplente en Leganés. Por su parte, el flamante técnico valencianista, Celades, volvió al 1-4-4-2, con Guedes en el banquillo, Ferrán Torres y Cheryshev por los costados y la dupla formada por Maxi Gómez y Rodrigo en punta.
El Athletic encaraba el encuentro con el objetivo de seguir con su inmejorable inicio de liga en San Mamés, al contrario que su rival, que con tan solo 6 puntos en medio del terremoto generado por la destitución de Marcelino, buscaba recuperar las buenas sensaciones con las que finalizaron la pasada temporada.
Con el partido iniciado, fueron los leones quienes llevaron el peso del partido, tratando de generar peligro con centros laterales. No obstante, en el minuto 5 Rodrigo metió el miedo en el cuerpo a la grada local con un disparo que se fue alto. Dos minutos después, los rojiblancos respondieron con un centro al área de Cillessen al que Williams no llegó por milímetros.
A partir del minuto 10 el Valencia comenzó a entrar en el partido, dominando la pelota y llegando a zonas de peligro, con varios córners a favor y ocasiones de gol.
En el minuto 27 llegó el gol valencianista. Tras un buen pase al hueco de Maxi Gómez, el joven Ferrán Torres pisó línea de fondo para asistir a un Cheryshev que anotó a placer ante Unai Simón. Se rompía la imbatibilidad del Athletic en San Mamés en el campeonato doméstico esta temporada.
A partir del gol, el conjunto local no supo reaccionar. El resultado desfavorable les hizo sentirse demasiado presionados en su propio estadio, dando como resultado numerosas imprecisiones a la hora de dar el último pase en campo rival. Por otra parte, los visitantes se sintieron aún más cómodos, otorgándoles la pelota a los bilbaínos, pero manteniendo el bloque de 4-4-2 al que parece que ha acabado sucumbiendo Albert Celades.
Aun así, el equipo vasco pudo haberse ido con un menos amargo sabor de boca a vestuarios después de que Ander Capa enviase al lateral de la red una pelota dividida en el área rival.
En la segunda parte, los de Garitano buscaron desde el arranque el ansiado gol de la igualada, aunque el equipo ché no lo permitió. En el minuto 55, Iñaki Williams tuvo por partida doble la oportunidad de hacerlo pero, primero Cillessen y luego el palo, castigaron la mala suerte del nueve rojiblanco.
A medida que avanzaba el encuentro, el Valencia fue incluso incrementando su porcentaje de posesión, además de ir cerrando el encuentro poco a poco al más puro estilo Marcelino, con un centro del campo sublime al corte comandado por Parejo y Coquelin. Al igual que anteriormente con Maxi Gómez, Unai Simón volvió a ser providencial para el equipo local, salvando el 0-2 en un mano a mano con Rodrigo en el minuto 72.
En los minutos finales, con Aduriz en punta y Lekue en banda, tratando de darle la profundidad que no supieron darle los titulares en el día de hoy, el Athletic trató de buscar el empate a la desesperada. Sin embargo, después de la salida por lesión debido a una mala caída de Yuri hizo que las esperanzas por puntuar se desvaneciesen.
Marcador final de 0-1 para el Valencia, que se pone con 9 puntos, y se convierte en el primer equipo en ganarle en San Mamés al Athletic de Garitano. Del mismo modo, además de la invatibilidad este año en liga, el club entrenado por el ex-técnico del Eibar pierde una oportunidad de oro por comenzar a asentarse en los puestos privilegiados de la clasificación.