El Real Madrid solamente ha podido contar con todos sus centrocampistas en cuatro partidos.
Si el año pasado el Madrid tenía carencias de cara al gol, esta temporada se antoja que la línea más frágil va a ser (y está siendo) la sala de máquinas. En efecto, el año pasado el equipo echó en falta un hombre gol (cosa que Karim Benzema nunca ha sido) y este parece que Zidane va a tener que hacer malabares para completar el centro del campo del equipo.
Una de las razones de esta falta de centrocampistas es el reblandecimiento de la línea de creación el pasado mercado. La obsesión de Zidane en la llegada de Pogba ha cerrado la puerta a otros posibles fichajes que sonaron para el club como Van de Beek, del Ajax de Amsterdam, o Eriksen, del Tottenham. Asimismo, el entrenador también pidió y forzó la salida de algunos centrocampistas que ya tenía el equipo, como Ceballos, Ødegaard (que pertenecía al equipo pese a haber estado cedido en Holanda) o Marcos Llorente.
Para más inri, las lesiones se están cebando con el equipo y eso está afectando gravemente a esta línea. Esto puede verse en la estadística que nos desvela el Diario Marca de que los cuatro centrocampistas con los que cuenta el Real Madrid en plantilla (Luka Modric, Toni Kroos, Fede Valverde y Casemiro) sólo han estado disponibles a la vez en cuatro partidos esta temporada.
Ahora mismo el centro del campo del Madrid vuelve a encontrarse en jaque por las lesiones de Kroos y Modric. El croata fue el último en caer en el partido que disputó contra la Gales de Gareth Bale (que también acabó el partido con molestias), mientras que Kroos se lesionó la última jornada de liga contra el Granada.
Con este panorama el equipo solo cuenta con Valverde y Casemiro para el centro del campo, por lo que Zidane se verá obligado a volver a usar a Isco y James de centrocampistas. Esta posición no les resulta ajena a ninguno de los dos, pero lo cierto que en ella se encuentran lejos de explotar sus mejores cualidades deportivas.
