Las últimas tres victorias seguidas de los “txuriurdin” y el pase a cuartos de final de Copa dan un aire de fiesta en Anoeta
Los últimos 3 partidos de la Real Sociedad han dado alas a la afición donostiarra para volar muy alto. Esto se vio reflejado en el partido de ayer, miércoles a las 9 de la noche, con una entrada de casi 32.000 personas. En comparativa, la Real jugó la semana anterior, el mismo día de la semana y a la misma hora, y el aumento ha sido de 11.000 personas más. Solo había que ver cómo botaba el Reale Arena tras el 3-1 a Osasuna. Se tambaleó hasta la cubierta.
“Con esta afición todo se puede”
Imanol Alguacil quiso resaltar en rueda de prensa el papel tan importante que tiene la afición de la Real cuando está metida en el encuentro. “Es una gozada el estadio así. Sin la fuerza de la gente no hubiéramos sacado adelante el partido, los jugadores realmente lo agradecen” declaró el entrenador de la Real. Hasta el propio entrenador de Osasuna, Jagoba Arrasate, comentó que el nuevo campo es “increíble” y afirmó que Anoeta es su “casa”.
Mantener el ritmo
Esto no puede parar. La Real se posiciona en un buen lugar para dar ese salto que todos queremos. La afición está al 100%. Isak está “On fire” con 4 goles en los últimos 3 partidos, Barrenetxea poco a poco se está ganando un puesto en el equipo y brilla cada vez que tiene el balón, Portu con su garra y entrega hace que todos luchemos los balones como si fuéramos uno, y Odegaard tiene la llave de la felicidad. La Real despega, pero queda lo difícil, tocar las estrellas.