La evolución de Adama Traoré en estos últimos meses le están haciendo ser un pilar fundamental en el Wolverhampton de Nuno Espírito Santo.
Que un jugador pase de 8 titularidades en toda la campaña pasada en Premier League, a llevar 17 en poco más de medio año, es difícil de imaginar. Más aún si vemos que su nombre es Adama Traoré, y que su entrenador es Nuno Espírito Santo, que prácticamente no varía su once titular desde su llegada a los Wolves. La pasada temporada, Adama era un útil desde el banquillo por su explosividad, y todo apuntaba a que este año sería igual. Pero algo cambió.
Así entró al once
Cuando Nuno no pudo contar en varios partidos con Matt Doherty, inamovible en el carril diestro del 1-3-5-2 invariable de los Wolves, el preparador portugués optó por recolocar a un extremo como Adama Traoré. Un jugador que físicamente es muy superior a la mayoría, con una gran explosividad en carrera, pero que siempre había sido nefasto en la toma de decisiones, y muy irregular. Pero Adama demostró que había evolucionado. Defensivamente muy comprometido, comenzó a sumar grandes actuaciones. Y su consagración se dio en la victoria de su equipo en el Ettihad Stadium, donde el español marcó los dos goles de su equipo ante el Manchester City de Guardiola, y se mostró muy superior en todos los duelos individuales, tanto ofensivos como defensivos, ante sus rivales.
Fueron tan buenas actuaciones que cuando Matt Doherty volvió, Nuno hizo algo que nadie esperaba, y cambió el esquema, de un 1-3-5-2 a un 1-3-4-3, para juntar al irlandés con el español y hacer así una banda derecha que daba bastante miedo. Más si pensamos en que con Doherty por detrás, Adama estaba más liberado ofensivamente.
Sus actuaciones lo han consagrado
Y así llegamos hasta ahora. Adama Traoré está siendo una de las bases del juego de los Wolves. Han basado partidos en simplemente lanzar balones a la espalda de la defensa rival, para que el extremo español impusiera su superioridad física y pusiera centros y balones al excelente rematador que es Raúl Jiménez. Además, Adama ha demostrado estar centrado en el fútbol y en mejorar aspectos de su juego. Ha mejorado de sobremanera la toma de decisiones, ha ganado regularidad e incluso ha incrementado sus cifras. Esta temporada, lleva 5 goles y 10 asistencias en 36 partidos oficiales, contando Premier League, FA Cup y tanto la ronda clasificatoria de UEFA Europa League como la fase de grupos de esta competición.
En definitiva, Adama Traoré ha pasado de ser un jugador complementario en una plantilla, ha ser clave para el juego de su equipo e, incluso, llegar a ser llamado por la selección española, aunque no pudo asistir por lesión. Un ejemplo de cómo tener la cabeza centrada, evolucionar y madurar puede transformar a un futbolista.