Sin duda, la llegada de Bruno Fernandes al Manchester United el pasado mercado es una de las grandes incorporaciones del año.
Bruno Fernandes llegó al Manchester United el pasado mes de enero, por una cantidad cercana a los 55 millones de euros. Firmó por los Red Devils el día 29 de enero, a un Manchester que llegaba con dos derrotas consecutivas en Premier League.
El primer partido que el equipo jugó con el portugués en plantilla fue una victoria en EFL Cup frente al Manchester City. Tras ello, empataron con los Wolves y ganaron al Chelsea en Premier League. Acababa de llegar pero ya se notaba la influencia de Bruno dentro y fuera del campo.
Tras ello, empataron frente al Club Brujas, ganaron al Watford, ganaron al Brujas y, hoy, han empatado con el Everton.
Estos son simples resultados, pero la clave es el cambio de dinámica que han tenido en Manchester desde que Bruno firmó por el club. El portugués ha transmitido una confianza a sus compañeros que necesitaban desde hace mucho tiempo.
Además, con el fichaje de Bruno Fernandes, el 4-2-3-1 que no llegaba a dibujarse de manera exacta, y siempre desembocaba en un 4-3-3 muy abierto, pasó a ser el esquema favorito de Ole Gunnar Solskjaer, que por fin encontraba la fórmula para organizar a todos sus jugadores.
La inversión por el portugués fue muy importante pero, simplemente viendo este cambio, sin influir su rendimiento individual, ya se puede ver que es una inversión rentable, por un jugador que tiene solo 25 años. Su valor actualmente es de 60 millones, lo que costó. Cuando pasen algunos años, se podrá comprobar si de verdad, individualmente, ha sido un buen fichaje pero, el cambio que ha supuesto en la temporada del Manchester United es digno de admirar.
