Desde que el Real Zaragoza descendiese en 2013, este es el primer año donde se ha mostrado fiable en defensa. Una fiabilidad que le ha llevado a ser el segundo clasificado.
Desde verano las órdenes de Víctor a Lalo fueran claras, crecer desde atrás. Conseguir una defensa fiable y contundente, algo que el Real Zaragoza hacía mucho que no tenía. Los primeros en llegar para conseguir este plan fueron Carlos Vigaray y “Pichu” Atienza y desde un primer momento, han dado el rendimiento esperado.
Rendimiento de la defensa hasta el mercado invernal
Durante la primera mitad de temporada, el conjunto blanquillo tuvo dos caras en defensa, la sólida y la débil.
La primera viene dada porque se tuvo a la defensa titular. Cristian, Vigaray, Atienza, Clemente/Grippo/Guitián, y Nieto formaron una defensa casi infranqueable. Todos aportaban seguridad, contundencia y salida de balón (de ahí lo de crecer desde atrás). Con estos tres aspectos, al menos los blanquillos se aseguraban un punto y un mayor grado de competitividad. El Real Zaragoza era el equipo menos goleado, con tan solo 4 goles en contra en 7 jornadas.
Los problemas vinieron a raíz de la lesión de Vigaray. El lateral derecho vino para cubrir las necesidades de Víctor Fernández, y con su lesión el equipo dejaba la banda derecha algo descuidada. A esto habría que sumarle después las lesiones de Atienza y Cristian Álvarez, los otros dos pilares fundamentales de la defensa. Así, el equipo encajó en 12 partidos, 17 goles. Unas cifras que hicieron que equipo de Víctor estuviese por primera vez fuera de las posiciones de Play-Off durante dos jornadas.
El mercado de invierno y la llegada de El Yamiq
Con la llegada del mercado invernal, el entrenador aragonés pidió a la dirección deportiva la llegada de un central para así aumentar la competitividad y tener un poco más de fondo de armario. El preferido por Lalo Arantaguei, y que ya intentó traer en el mercado estival, era Jair Amador. Pero su alto salario y el poco margen económico del que disponía el conjunto maño hicieron que la operación fuera inviable.
De esta forma, Lalo se vio en la obligación de buscar internacional, y ahí salió el nombre de Jawad El Yamiq. El central marroquí, internacional con su país, apenas tenía minutos en el Genoa italiano por lo que su salida era un hecho.
Tras su llegada, le tocó debutar en Cádiz y desde entonces, se ha convertido en un fijo de la defensa. Su nivel mostrado ha sido magnífico, aportando contundencia, salida de balón y ser el líder de la defensa, marcando siempre a la altura en la que debe de estar la línea defensiva. Cada partido suyo es un espectáculo, y lo mejor de todo es que va a más.
Acompañado de Cristian, Vigaray y Nieto, han formado la mejor defensa de la categoría y mantienen al equipo siempre con opciones de ganar, como se pudo ver en Málaga. La defensa zaragocista aguantó las embestidas de los malagueños, hasta que Luis Suárez, al final del partido marcó el gol que les dio la victoria.
Y a esto se le llama crecer desde desde la defensa. Desde que el Zaragoza recuperó la fiabilidad atrás, no sabe lo que es perder. Los milagros de Cristian, la contundencia de El Yamiq y Atienza, la fortaleza defensiva de Vigaray y el pundonor de Nieto han hecho que los zaragocistas sean segundos y el equipo menos goleado.
