El Granada ha sido el equipo revelación de la temporada, en cambio, su esquema táctico ha ido cambiando poco a poco durante la temporada, de modo que Diego Martínez ha conseguido potenciar al máximo a todas sus piezas
El inicio con el 4-2-3-1
El conjunto nazarí empezó la temporada de la forma más sorprendente posible. Protagonizó un auténtico partidazo contra el Villarreal en el cual hubieron mucho goles (4-4), en cambio, lo más sorprendente fue que el Granada encajara 4 goles en un mismo partido, ya que en la temporada 2018-2019 fue el equipo menos goleado de la Liga Smartbank.
En las cuatro primeras jornadas Diego Martínez utilizó un marcado 4-2-3-1, utilizando a Fede Vico como enganche, la pieza clave de este esquema. Los dos primeros encuentros contra Villarreal y Sevilla fueron complicados pero contra Espanyol y Celta de Vigo, el equipo se enchufó y consiguió dos victorias consecutivas.
El paso al 4-3-3
La lesión de Fede Vico en el partido contra el Celta obligó al técnico gallego a modificar su esquema. Retiró la figura del mediapunta y añadió un centrocampista para dar más músculo a la medular del equipo. El hombre beneficiado por este cambio fue Ramon Azeez, el cual jugó su primer partido como titular contra un rival difícil, el FC Barcelona. El 4-3-3 ha sido durante esta temporada, el esquema más utilizado por Diego Martínez y también ha sido el que más éxitos le ha dado.
Lo utilizó a partir de la jornada 5, después de dar tan buen resultado con esa victoria frente al FC Barcelona en el Nuevo Los Cármenes. El Granada jugaba muy bien y con una idea muy clara. La pareja de centrales formada por Domingos Duarte y Germán Sánchez estaba siendo un muro, el centro del campo controlaba muy bien los partidos con Montoro y Yangel Herrera el mando, y los extremos era auténticas balas. El Granada consiguió hacerse con el liderato en la jornada 10 de la Liga, algo que no sucedía desde la temporada 1973-1974.
La dupla de delanteros del 4-4-2
En el partido contra el Alavés que el Granada ganó 3 a 0, Diego Martínez utilizó a Carlos Fernández como segundo delantero, acompañando a Roberto Soldado, ambos anotaron gol en ese partido. Después de ese éxito el entrenador gallego empezó a confiar en esta dupla de delanteros, en cambio, el Granada encadenó cinco derrotas consecutivas después de ese partido, utilizando este 4-4-2.
A pesar del bajón del equipo, aquí fue donde empezó la irrupción de Carlos Fernández. El jugador cedido por el Sevilla empezó a mostrar su gran calidad, siendo el partido contra el Espanyol el partido en el que confirmó que ha llegado a la máxima categoría del fútbol español para quedarse.
Los tres centrales del 5-3-2 y Darwin Machís
A partir de la jornada 23 contra el Atlético de Madrid, el Granada empezó a utilizar el sistema que se está poniendo de moda en el mundo del fútbol actual, los tres centrales. Domingos Duarte, Germán Sánchez y Víctor Díaz es el trío de centrales que tan buen resultado ha dado en los últimos partidos al Granada. Víctor Díaz venía actuando como lateral derecho cuando el Granada jugaba con cuatro defensas, en cambio, con la llegada de Foulquier en el mercado invernal Diego Martínez ha visto beneficiada su pizarra y ha conseguido dar con la clave para que el equipo vuelva a la senda de la victoria.
Los tres centrales acompañados de dos carrileros profundos han conseguido dar estabilidad a la defensa nazarí, pero estos no han sido los únicos beneficiados por este cambio de sistema. El venezolano Darwin Machís se ha convertido en una bala por la banda izquierda. Colocándose como un tercer falso centrocampista en defensa con el 5-3-2 y haciendo mucho daño en ataque, colocándose como extremo izquierdo con mucha libertad, Soldado como delantero y Carlos Fernánez como un falso extremo derecho que tiende a tirar hacia dentro.
Esta ha sido la evolución del Granada durante una temporada en la que ha dado el nivel y de sobra. Diego Martínez ha demostrado ser un gran entrenador, siendo muy flexible y sacando lo mejor de cada jugador.