El francés está siendo una de las revelaciones de la Bundesliga, tanto es así, que sus goles están ayudando mucho al Gladbäch a volver a la Champions
Un año antes de que Lilian Thuram se convirtiera en campeón del mundo con la selección francesa en 1998, nació su hijo Marcus. Ahora en 2020, Thuram júnior es uno de los jugadores de moda en la liga alemana. Su padre era un jugador de corte defensivo, bastante corpulento, su hijo, de esas dos cualidades, solo ha heredado una, y es que es un atacante muy especial. Es muy rocoso, tiene un torso bastante ancho y eso lo hace ser poderoso en duelos individuales, pero además tiene una zancada de atleta y a pesar de medir 192 centímetros, es muy hábil con el balón y en los partidos suele dejar detalles de calidad, algo extraño en un jugador de su embergadura. Esas características lo hacen un jugador indetectable para los defensas.
Después de una primera temporada en Ligue 1 donde no llamó la atención, en su segunda sacó la cabeza y a pesar de no poder evitar el descenso del Guimgamp, en lo individual hizo su primera buena temporada en la élite, anotando 9 goles, cifra que llamó la atención del Borussia Mönchengladbäch, club por el que fichó en verano por 9 millones de euros. Cifra la cual ahora parece insignificante, viendo el rendimiento del galo. Pues está confirmándose como jugador en la Bundesliga, donde lleva 10 goles y 8 asistencias en 29 partidos. Forma un trío atacante junto a Pléa y Embolo que está siendo sensación de la competición.
¿Cómo juega?
Thuram es un jugador diferente, su cuerpo le permite ser infranqueable contra todo el que cuerpea con él y su velocidad, llegar a los balones en profundidad después de hacer sus clásicos desmarques de ruptura, una de sus grandes armas. También ha mejorado en su definición ya que se le tachaba como ‘jugador fallón’ en Francia, pero lo que está sorprendiendo en la presente temporada es el nivel que está mostrando en cuanto a dar pases de gol. Leva 8, cuando solo sumaba 4 en sus dos anteriores experiencias en en el fútbol francés.
Después de pasar por todas las categorías inferiores de Francia, espera la llamada de Deschamps para debutar con la selección absoluta. Es un ejemplo más de la gran cantidad de talento que está surgiendo en Francia y que se está desarrollando en Alemania, claros ejemplos son su compañero de equipo Pléa, o en otras entidades; Coman, Konaté, Upamecano o Diaby. Lo que está claro es que a sus 22 años, está causando interés de grandes clubes europeos y que ya sea en Alemania o en otra liga, si todo va bien, será un jugador importante que puede superar a su padre en cuanto a palmarés, y esto es mucho decir.
En la pasada jornada de la Bundesliga fue portada en todos los periódicos, por su celebración pidiendo justicia para George Floyd. Acto por el cual se le reconoció por el mundo del fútbol, al igual que Lilian, quien en muchas declaraciones mostraba su desprecio al racismo.