En Estados Unidos hemos disfrutado de un novedoso torneo para arrancar las primeras competiciones post pandemia, y ha terminado con la victoria de Houston Dash
Tras el parón por la pandemia, arrancaba el fútbol femenino en Estados Unidos con una nueva competición, la Challenge Cup. En un principio se enfrentarían las nueve franquicias norteamericanas, pero el Orlando Pride de Alex Morgan y Marta se retiraría debido a que seis jugadoras del equipo dieron positivo por COVID-19. De esta forma fueron ocho los equipos que jugaron el torneo, que constaba de dos fases.
La primera, una fase preliminar con cuatro partidos por cada equipo, y luego una fase de eliminatorias donde los mejores clasificados jugarían contra los peores. Un formato muy vistoso, aunque como era de esperar, se vieron partidos un tanto trabados y densos. Eso sí, hubieron muchas sorpresas.
La primera fase era un poco más para ver como llegaban los equipos preparados tras tantos meses de parón. Cuatro partidos por equipo dan para poco, aunque tras quedar sellada la clasificación, ya había varios equipos favoritos para llevarse el torneo. North Carolina Courage, con pleno de victorias (12 puntos), Washington Spirit (7 puntos) y el OL Reign de Celia Jiménez (5 puntos), ganaban en las apuestas.
Luego estaban empatados a 4 puntos el Houston Dash, las anfitrionas Utah Royals, el equipo de nuestra Vero Boquete, Chicago Red Stars y Sky Blue. Por último, Portland Thorns, con cero victorias y solo 3 puntos. De los encuentros disputados en la primera fase, destaca el empate a tres entre Houston Dash y Utah Royal, donde marcaron jugadoras destacadas en el torneo como Rachel Daly por partida doble y Vero Boquete.
En los cuartos de final de la fase de eliminatorias fue donde llegaron las grandes sorpresas. La primera de ellas fue la derrota de North Carolina Courage ante Portland Thorns por 0-1 con tanto de Morgan Weaver. Houston Dash también clasificaría tras vencer en penaltis a Utah Royals tras una gran actuación de la portera Jane Campbell.
Otra sorpresa llegó con el triunfo en penaltis de Sky Blue ante Washington Spirits después de otro gran partido de una guardameta, Kailen Sheridan. Por último, otro favorito como OL Reign caería ante Chicago Red Stars también en penaltis. En las semifinales se enfrentaron Houston Dash ante Portland Thorns y Chicago Red Stars contra Sky Blue. De estos cuatro alcanzaron la final Houston Dash y Chicago Red Stars.
El último partido del torneo terminaría con un 2-0 para Houston Dash con goles de Schmidt y Groom, y sobretodo un partidazo de Rachel Daly, que fue máxima goleadora con 3 goles y así mismo nombrada MVP de la competición.
Otras premiadas fueron la portera Kailen Sheridan con el guante de oro y Ashley Sanchez de Washington Spirit como mejor joven promesa. Además, se votó el mejor once de la competición, donde salieron elegidas: Britt Eckiestrom; Julie Ertz, Abby Erceg, Casey Short, Jaelene Daniels; Rachel Daly, Shea Groom, Rose Lavelle; Debinha, Lynn Williams, Lindsey Horan.