La Supercopa de Europa entre Bayern de Münich y Sevilla tendrá un aforo máximo de un 30% de la capacidad del Puskas Arena
Ha saltado la noticia hoy a las 14:20h cuando a través de sus redes oficiales, la UEFA confirmaba que habría público en la Supercopa de Europa. Tras más de seis meses sin un aficionado en las gradas de un partido continental, la espera ha terminado.
El Comité Ejecutivo de la UEFA ha decidido que, con carácter especial, la final entre Bayern y Sevilla tenga público. Sin embargo, el resto de partidos como los que se deberán disputar a lo largo de esta tarde seguirán siendo a puerta cerrada.
El encuentro que deberá disputarse el 24 de septiembre en el Puskas Arena de Budapest tendrá un 30% de aforo. Esta noticia quiere decir que en torno a 20.164 aficionados podrán disfrutar de esta final. El Presidente de la UEFA, Aleksander Čeferin, ha confirmado que trabajará de la mano del Gobierno húngaro para que se tomen todas las medidas de seguridad.
“Estamos trabajando en estrecha colaboración con la Federación Húngara y su gobierno para implementar medidas para garantizar la salud de todos los que asisten y participan en el juego. No correremos riesgos con la seguridad de las personas”
El Bayern de Münich como campeón de la Champions y el Sevilla tras volver a lograr la Europa League, se tendrán que desplazar a la capital de Hungría para jugar. Ha sido mucho tiempo sin que los aficionados de ninguno de los dos equipos pudieran pisar los estadios para animar a sus jugadores, pero ya podrán volver a hacerlo.
Esta medida se tomó en cuenta con los otros 55 miembros del consejo en la reunión celebrada el 19 de agosto. Aunque en un principio esto se haya confirmado de forma oficial, la Administración de la UEFA seguirá supervisando la situación. Si en algún momento es necesario tomar algún cambio, será el Comité Ejecutivo de la UEFA el encargado de realizar los cambios pertinentes.
