En el encuentro de hoy entre Barça y Madrid ha vuelto a levantarse la polémica tras un penalti pitado a favor del conjunto de la capital
“¿Por qué está acción sí es penalti y por qué esta no?”: esta es la pregunta que suena alrededor de todo el mundo cuando un colegiado, en un acto de decisión propia, señala penalti en un encuentro. Generalmente, esto solo sucede cuando se perjudica a grandes equipos como Real Madrid o FC Barcelona. En el día de hoy, tras una acción en la que Lenglet derriba mediante un agarrón a Sergio Ramos, el árbitro del encuentro ha señalado penalti, y muchos aficionados, en un acto quizás de desconocimiento del reglamento, hablan de “robo” o de “error arbitral”.
Lo primero a tener en cuenta es que el agarrón es claro. Este impide al ex del Sevilla saltar con naturalidad y rematar una pelota que iba directamente hacia él. Lenglet pierde claramente su marca y, en un intento de remediar este fallo, agarra a Ramos, quien finalmente acaba cayéndose al suelo. Es una acción muy clara, con la que algunas personas intentan ocultar el mal juego de su equipo. Lo que está claro es lo siguiente: el Real Madrid ha merecido la victoria, y el juego del FC Barcelona ha resultado insuficiente para un encuentro de tal calibre.
¿Qué pasa con el penalti a Sanabria?
El asunto que hace más compleja la acción producida en el día de hoy es el penalti no pitado a Sanabria hace poco tiempo. Es una acción muy parecida, en la que se agarra también al delantero del Betis, pero que se salda sin penalti. Aquí pueden entrar en juego varios factores, pero el más determinante es el siguiente: pese a que el VAR sí es una máquina, la gente que decide respecto a todo aquello que sucede en el campo son personas. Cada persona, como es natural, tiene un punto de vista que puede diferir en gran medida con el punto de vista de otros expertos. Hoy mismo ha sucedido esto, puesto que muchos ex árbitros han dado su opinión respecto a lo sucedido, y las opiniones de los mismos eran distintas entre sí: desde el “no es penalti” rotundo, al “está bien arbitrado”, pasando por el clásico “riguroso”.
Otro aspecto a tener en cuenta está en lo que el árbitro del VAR considera un error manifiesto, y que no es un error manifiesto. Posiblemente, hoy en el VAR habrían interpretado que la acción era punible, pero al no ser un error manifiesto, le han recomendado al colegiado del encuentro ir a ver la jugada, con lo que ha acabado dictaminando penalti. Por otra parte, la acción de Sanabria no fue concebida como un error manifiesto o incluso el árbitro estaba tan seguro de su decisión que prefirió no acudir a ver la jugada, porque al fin y al cabo, la decisión final es del árbitro de campo.
Por tanto, es inviable hablar de robo en el día de hoy. Primero porque el penalti es claro, puesto que Lenglet impide el remate limpio del central del Real Madrid; y segundo, porque el Real Madrid ha sido muy superior al FC Barcelona, sobre todo en la segunda parte del encuentro.
