Como si de dos corrientes filosóficas se tratara, el Sevilla FC se puede ceñir a estas dos posturas
Como si de Filosofía estuviéramos hablando, aunque con el fútbol se coordina muy bien, el Sevilla FC se puede definir sin ninguna duda en ser «Koundependista» y «Ocampista», haciendo un gran juego de palabras.
Con la ausencia de Koundé la pasada jornada ante el Eibar se pudo ver lo importante que es en la zaga defensiva, junto a su fiel compañero Diego Carlos. Se vio un equipo con menos fiabilidad atrás, con muchos huecos entre ambos defensas centrales, más por la zona del catalán Sergi Gómez y en el juego aéreo estuvo dominado por los armeros prácticamente todo el partido.
No obstante no hay que olvidarse de Lucas Ocampos, una figura que fue clave la pasada temporada cuando hablamos del gol. Una figura que destacó por encima de las demás convirtiéndose en el máximo artillero del equipo andaluz con 14 goles en total en La Liga, mejorando sus registros, por doble, de su anterior temporada con el Olympique de Marsella.
La Koundependencia como estilo de vida
Como si una forma de vida se tratara el Sevilla FC se acostumbró a ella cuando Jules Koundé empezó a jugar y empezó a coger ritmo hasta convertirse en uno de los jugadores revelación del equipo andaluz y de la Liga. Lo que fue el segundo fichaje más caro del Sevilla FC, 20 millones de euros, se puede convertir el próximo año en la venta más cara de los hispalenses. Su cláusula de rescisión es de 90M€ y e el pasado mercado de fichajes se pudo ver que Monchi y la directiva sevillista lo tiene claro, si quieren al internacional con la sub-21 de Francia deberán pagar 80M€, que ahora parecerán pocos.
Gracias a él se ha podido formar un triángulo defensivo formado por un francés y dos brasileños. Uno de 33 años y con toda ya una trayectoria completada por Europa jugando en grandes equipos como el Manchester City y otro brasileño, en plena edad perfecta, 27 años, para competir al máximo nivel en los mejores equipos de Europa, como el Sevilla FC.
Una conexión franco-brasileña que funciona a la perfección pero que si uno de ellos no está en el campo, su ausencia se nota. Esta vez le ha tocado a Jules Koundé, reforzando así el término que se le asigno hace unos meses como «Koundependencia» a nuestro Jackson Five que tantos buenos momentos nos dio en la última Europa League y que seguro que nos da esta temporada.
Lo que tiene el fútbol
Con una madurez impropia para su edad, el jugador está llamado a ser uno de los mejores centrales de Europa en los próximos años. De jugar en una localidad al Suroeste del territorio francés, Burdeos, con una población de apenas 200.000 habitantes, donde la mayoría de ellos se dedican a a la actividad vitivinícola y no ser reconocido tanto en Francia como en el contiene europeo a convertirse en el segundo fichaje más caro de la historia del Sevilla FC.
De cambiar el campo por el ambiente andaluz, la quiché lorraine por las espinacas con garbanzos, hasta convirtiéndose en el defensa central de moda, ya reconocido en todo el panorama mundial. Eso es lo que tiene el fútbol, hace magia y cuando no te das cuenta estás totalmente sumergido en él.
Ocampismo como clave gol
Proveniente del termino optimismo, palabra del latín antiguo, «optimum», «lo mejor», Lucas Ocampos, un argentino de pura cepa, como si de un caballo de pura raza español estuviésemos hablando, se ha ganado este término, que se conjunta muy bien con su forma de ser.
Lucha, pelea, se constante, no te rindas, son palabras que están grabadas a fuego en el cerebro y corazón del internacional argentino. Un argentino que se ha ganado estar entre los mejores jugadores de esta plantilla por la espectacular pasada temporada que realizó, es así que se convirtió en el máximo goleador del equipo, cuando tan solo vino para aportar velocidad y descaro por la banda.
Un Lucas Ocampos que se le está viendo mermado por el cansancio físico acumulado de la pasada temporada, tras estar compitiendo durante más de un año y tan solo descansar dos semanas. Porque cuando hablamos en clave gol, la contraseña es Lucas Ocampos.
Ocampos si empieza no acaba
Sin el atacante de la albiceleste en el terreno de juego el Sevilla FC pierde desparpajo arriba, pierde intensidad, pierde profundidad por las bandas, tanto izquierda como derecha. Es por eso y mucho más que el equipo de la capital andaluza debe recuperar la mejor versión de Ocampos para recuperar ese gol que tanto hace falta y que en estos últimos días muy poco hemos visto.
Las ocasiones llegan, pero la pelotita no entra en la red de la portería rival. Por eso la palabra optimismo es la mejor para representarle. A Lucas Ocampos tan solo le hace faltar marcar un gol en La Liga para reactivar su olfato goleador y empezar a volar, como si de un gorrión se tratara cuando aprende a volar y no para. Como dice el refranero español, chispa pequeña enciende un monte de leña.