Hellas Verona ha sido una de las grandes revelaciones en este comienzo de temporada de la mano de Juric en el banco
Hellas Verona lleva siendo un equipo duro desde la temporada pasada. Un equipo con un juego bastante físico y marcado en todos los sentidos. Ha dado una grata impresión para la liga, ya que hasta a los mismos equipos que pelean arriba, les ha quitado puntos y hasta cierto punto, le han jugado con bastante personalidad.
Juric ha logrado darle esa identidad que anhelaba el Verona, pero más allá de eso, ha convertido en jugador a futbolistas desconocidos, inyectándole una dosis de dinamismo y juego duro. Este estilo le ha quitado puntos a equipos de arriba como Juventus y Milan seguidamente.
Figuras inesperadas como Zaccagni y Barak en ataque y Lovato en defensa, han llevado a este equipo a este gran momento. Junto a Sassuolo, ha logrado cosas interesantes y ha dado la sorpresa contra buenos equipos. Lo admirable es el trabajo colectivo que tienen. Sin tener grandes jugadores, ni un gran plantel han sido ese equipo distinto que podría pelear por un puesto en Europa.
Todavía es una incógnita el futuro de este equipo. Se han visto muy bien en este inicio de temporada, pero lo que falta ver es si podrían mantener el impulso. Cuando llegue esa debacle de todos los años en todos los equipos, se tiene que ver reaccionaran. Pero hasta ahora se han vistos como un rival muy complicado de enfrentar
Lo que está claro, es que este es el camino. Pies en la tierra y seguir creyendo en esa idea que están mostrando. El mejor ejemplo es el partido contra el Milan, donde los de Pioli se durmieron 20 minutos y se fueron arriba en el marcador. Cuando lo ven claro, van a atacar. Pero cuando tiene que contraerse en defensa, también lo hace. Interesante idea.