El Burgos CF cayó 0-2 en casa frente a la UP Langreo, en un partido que definía quien lideraría el Grupo I de Segunda B
Esta tarde de sábado nos dejaría un enfrentamiento entre Burgos CF y UP Langreo correspondiente a la jornada 3. El partido no se pudo disputar en el anterior fin de semana por varios positivos en el equipo asturiano. Ambos conjuntos llegaban al partido con el objetivo claro de llevarse los tres puntos. El aliciente para ambos era la posibilidad de colocarse líderes en solitario del Grupo I de Segunda División B. Los burgaleses necesitaban los 3 puntos, mientras al Langreo le valía con un empate para colocarse a la cabeza.
La victoria, los tres puntos y el liderato pondrían dirección a Langreo con un partido muy sólido de los asturianos. En ataque, Pana y Ketu marcaron las diferencias para el equipo entrenado por Ángel Rodríguez. Mientras tanto, la sólida defensa asturiana incapacitó el ataque burgalés, que se mostraba desesperado y frustrado. El camerunés cedido por el Rayo Vallecano haría el primer tanto visitante en la primera parte con un gran cabezazo. En la segunda mitad, Miguel Santos duplicaría la distancia con una sensacional volea dentro del área.
Los blanquinegros, impotentes ante las llegadas rivales y poco efectivos en el área contraria, perdían así sus opciones de liderato. Con su entrenador, Julián Calero, sin la posibilidad de estar en el banquillo con su plantilla y pensándose su continuidad. Con un ataque, que aunque con grandes nombres no parece terminar de encajar. Y con un estilo de juego pobre y en el que apenas se genera peligro al rival; el Burgos parece ahora lejos de encontrar su objetivo del ascenso. Y es que los castellanos se quedan en la séptima posición con apenas 6 puntos.
Un cambio de sistema podría ser clave para que los burgaleses encaminen su rumbo hacía el éxito. Y es que con el actual (1)-4-4-2, su jugador más talentoso (Juanma García) no participa apenas en la generación de peligro. Sin especialistas en el centro como Saúl Berjón y con tan solo un rematador como Guillermo en el campo, los centros laterales quedan estériles. Con un esquema que permita a Juanma recibir en tres cuartos de campo y asociarse se pueden explotar mejor sus virtudes. Y es que este esquema beneficiaría también a jugadores de banda como Javi Gómez o Raúl Alarcón, quienes tendrían mas opciones de desbordar. Estarían también más aprovechados los desmarques de Guillermo en la punta de ataque. Además el doble pivote, estaría mas resguardado y sin tanta responsabilidad en las tareas de creación que actualmente.
