El Wolverhampton Wanderers, ante la lesión de gravedad de Raúl Jiménez, quiere fichar a un delantero de garantías como Maxi Gómez
Por ello, ha fijado su radar en Maxi Gómez, delantero uruguayo del Valencia Club de Fútbol. Un killer del área. Y un delantero de los que tiene el gol entre ceja y ceja. Además, según las últimas informaciones, parece que los agentes de Maxi Gómez, grandes controladores del mercado en la Premier, van tanteando a equipos para que su representado recale allí.
Asimismo, la situación del club de Mestalla pone en favor al Wolverhampton. Puesto que parece que el Valencia tiene que seguir vendiendo a sus jugadores para ajustar y sanear las cuentas de la entidad. Y, además, por el charrúa Maxi Gómez, sacarían un buen pellizco de millones que, ante la política actual de Meriton, un alto porcentaje iría destinado a su máximo accionista, Peter Lim.
Problema serio para el Valencia
Para un vestuario en reconstrucción como el del Valencia Club de Fútbol actual, sería un mazazo perder a uno de sus líderes emergentes. Así como a su máximo referente en ataque. Y a vistas de su forma de trabajar en el último mercado de transacciones, Javi Gracia no puede esperar, ni siquiera algún fichaje sustitutivo. Puesto que, en caso de fichar, se reforzarán las posiciones de defensa central y mediocentro.
A nivel deportivo sería también muy difícil para el Valencia, el hecho de que Maxi Gómez recale en el Wolverhampton o en cualquier otro equipo. Pocos jugadores hay como Maxi. Y menos aún en las condiciones en las que se encuentra el combinado del murciélago hoy en día. Uno de los ejes de la táctica del equipo se iría sin pena ni gloria.
¿Cómo encajaría Maxi Gómez en el Wolverhampton?
La Premier League es una competición muy exigente y física. No obstante, esto sería algo a lo que Maxi no tendría problema de adaptación. Pero, el juego del Wolverhampton es muy directo. Más incluso que en el Valencia. Algo que, dependiendo de los acompañantes que el uruguayo tenga, podrá beneficiarle o perjudicarle. A priori, sería una unión casi perfecta. Hablando en materia de juego-jugador, es poner a un finalizador en un equipo de ataques directos.