El antiguo director deportivo del Sporting, Torrecilla, se ha convertido en el nuevo del Real Zaragoza
La situación en La Romareda preocupa y mucho. El conjunto maño es, tras la finalización de la jornada 17 de LaLiga Smartbank, uno de los equipos que descenderían a la Segunda División B. Más concretamente, se sitúan en la vigésima posición de la tabla, con tan solo 13 puntos en su casillero. El rendimiento del equipo deja mucho que desear, y ya fue cesado como entrenador del equipo Rubén Baraja para buscar un cambio en la situación.
Viendo el juego del equipo, también se ha mirado al Consejo de Administración. Antes de la disputa del partido entre Zaragoza y Fuenlabrada, una cantidad considerable de aficionados se reunieron en los aledaños del estadio para mostrar su descontento con la gestión del club. Anterior a esto ya fue cesado Lalo Arantegui, que era el director deportivo del Real Zaragoza desde el año 2017.
Tras este cese, algún sustituto tenía que llegar a la dirección deportiva del club maño. Tras varias especulaciones entre Óscar Perarnau y Torrecilla, el elegido ha sido el segundo de ellos. Torrecilla se ha convertido en el nuevo director deportivo del conjunto aragonés hasta la finalización de la próxima campaña.
Llega tras poner fin a su corta etapa como entrenador en Bélgica. Ha estado muy pocos meses en el Waasland-Beveren de la primera división belga. Así pues, su aventura por tierras belgas ha sido muy breve, y regresa al territorio español, que de seguro conoce mejor.
El nuevo director deportivo zaragocista cuenta con una amplia experiencia en distintos clubes. Empezó en equipos de la talla de Novelda, Cartagena o Salamanca. Llegó al RC Celta de Vigo, donde el equipo gallego pasó de Segunda División a competición europea bajo la batuta de Torrecilla. Tras ello, estuvo en el Betis y en el Sporting de Gijón.
Su paso por el club gijonés no dejó muy contenta a la afición sportinguista, así que habrá que ver como hace su trabajo en Zaragoza. Tendrá que hacer cosas desde el principio, pues en menos de un mes se abre el mercado invernal, y los maños necesitan refuerzos para salvar la categoría.