El filial perico ha mejorado su juego con respecto al inicio de competición pero sigue sin lograr muchos puntos
Se podría decir que en la Ciudad Deportiva Dani Jarque sucede un quiero y no puedo. Esto se debe a que tanto Espanyol B como Espanyol femenino han mejorado su juego con respecto al inicio de temporada, pero ninguno de ellos logra tantos puntos como es esperan. En este artículo dejaremos de banda a la sección femenina, para centrarnos en el filial dirigido por José Aurelio Gay.
Empezando por lo que más importa, que es la clasificación, el Espanyol B está ubicado en el grupo III. Dentro de este grupo está ubicado en el subgrupo A, en el que solo hay equipos que pertenecen a la Federación Catalana de Fútbol. Están situados en la octava posición con 11 puntos.
Si bien es cierto que el grupo catalán es considerado uno de los más competitivos dentro de la Segunda División B, el filial perico tiene una exigencia muy elevada. Esta competitividad es bien clara si se mira la tabla. Del primer clasificado (Nástic) al noveno (Cornellá), tan solo hay una diferencia de 5 puntos.
El juego de los pericos en estas primeras ocho jornadas no ha sido malo. Han competido ante todos los equipos, pero los resultados no han acompañado en la mayoría de duelos. Sin ir más lejos, en la última jornada antes del parón navideño, jugaron ante el Nástic de Tarragona, líder del grupo. El choque acabó empate a 1, y los granas lograron la igualada en el minuto 88.
En el Espanyol B tienen una plantilla muy joven. Con toda probabilidad, es el equipo con la media de edad más baja del grupo, y quizás de la categoría. Tiene un promedio de 19,6 años, casi un año menos que en la temporada anterior. Solo hay tres jugadores que superan los 21 años (Álex Salto, Ricard Pujol y Becerra). El resto de la plantilla tiene 20 o menos años, convirtiendo al equipo en un inexperto en una categoría tan dura como es la Segunda División B.
Además, se han incorporado a dos jugadores jóvenes pero a su vez interesantes. Hablamos de Nabil Touaizi y de Josema Raigal. El primero llegó procedente del Manchester City y actúa como delantero centro. En cambio, el otro jugador llegó desde el Real Murcia y juega de extremo derecho. Son dos pilares de este Espanyol B, pero hasta el momento no se les ha visto en exceso, y José Aurelio Gay les necesita a tope para lograr sus objetivos.
Partidos para sacar puntos tras las Navidades
El principal objetivo del Espanyol B en esta campaña 2020 – 21 es no descender a la Segunda División B. Con la creación de la Segunda B Pro, todo aquel que no se meta en esta categoría podría considerarlo como un descenso. En estos momentos el Espanyol B jugaría el play-off para meterse en dicha nueva competición, pero el principal objetivo es meterse de forma directa.
Para ello necesitan estar dentro de las tres primeras plazas. Si quieren lograr esto, deberán hacer un buen mes de enero. Visitarán el campo del Olot y el Sagnier, estadio del Prat. Para finalizar el mes recibirán en la Ciudad Deportiva Dani Jarque a un rival de altura como es el Andorra.
Desde el club perico confían en su filial y esperan que la próxima campaña el equipo esté dentro de la Segunda B Pro.