Los donostiarras continúan sin saber lo que es ganar en 2021 y sus aspiraciones a alcanzar los primeros puestos se desvanecen
La Real Sociedad vive un momento complicado. En cuestión de jornadas ha visto desaparecer su renta y buen estado de forma, cayéndose de la zona privilegiada de la tabla. Tras vivir el frenesí de las primeras jornadas, de las victorias abultadas de cada semana, los donostiarras han pasado a intentar, como mínimo, puntuar. Un cambio brusco, no sólo de forma, sino también de mentalidad en un vestuario poco experimentado.
El principal problema de los vascos no reside únicamente en la mala suerte de las lesiones de David Silva, tal y como achacan muchos. El mago canario se está perdiendo gran parte de su primera temporada con el conjunto txuri-urdin, algo que está lastrando a los suyos. Pero la clave del bajón reside en la complejidad que tiene la moral. Cualquier contratiempo trastoca los planes iniciales de un Imanol Alguacil poco acertado últimamente. Ayer en Villarreal el equipo mostró una cara distinta a la mencionada. Tras el ‘chicharro’ de Dani Parejo cuando apenas habían transcurrido 2 minutos del encuentro la Real se volcó sobre el área enemiga, aunque con un premio insuficiente. El empate de Alexander Isak cuando el partido agonizaba, tras haber intentado hasta 12 disparos durante los 90 minutos, es buena prueba de la poca efectividad de los vascos de cara al arco. Pero lógicamente, el poco acierto a portería mina la moral de cualquiera, y más si se deja llevar por sus emociones.
Caída en picado
Esa poca contundencia en área rival y también propia (los desajustes en defensa están a la orden del día), unida a la lesión de Silva y la débil mentalidad del equipo, ha propiciado una caída en picado desde la cima para la Real Sociedad. Se asentaron pronto en el liderato, aprovechando los malos momentos de Real Madrid, Barcelona o Sevilla y la tardanza del Atlético. Pero tras varias semanas ejerciendo su ley, incontestables en casa y a domicilio, comenzó su particular descenso sin arnés alguno.
La de Cádiz fue la última gran tarde de una Real valiente, vistosa y siempre difícil de doblegar. Los gaditanos aguantaron como bien pudieron las embestidas guipuzcoanas, hasta que el superlativo talento de la plantilla rival desbordó en el partido. Después de aquel 0-1 en Andalucía la Real Sociedad sólo ha vuelto a puntuar por tres en el derbi vasco. Una sola victoria liguera desde noviembre, lo que hace imposible mantener la candidatura a entrar en ‘zona Champions’.
Esta situación les ha hecho caer hasta la sexta plaza, asentada pero amenazada en puestos de Europa League. Se encuentran a tres puntos de su rival de ayer, a 5 del 4º clasificado FC Barcelona que podría alejarse más hoy y 7 puntos por debajo del Sevilla, que además tiene un partido menos. Se aleja de esta manera la clasificación a la Champions League cuando apenas se ha jugado poco más de la mitad de esta Liga. La Real Sociedad deberá remar contra viento y marea si quiere remontar la desventaja y soñar con el pase a las noches europeas.
