Este domingo la Real Sociedad recibirá al Cádiz en su campo, un equipo que trae buenos recuerdos esta temporada a los donostiarras
La Real Sociedad ha perdido en los últimos meses esa alegría en los metros finales que la caracterizó la pasada temporada y las primeras jornadas de la actual. Los vascos solo han saboreado la victoria en un duelo de los últimos 11 partidos de LaLiga. Una cifra muy pobre para un aspirante a jugar Champions League, dado el gran nivel que presenta su plantilla en todas las posiciones.
Los guipuzcoanos comenzaron arrolladores en Liga, pero tras la victoria en Cádiz comenzó su calvario. El empate en casa contra un gran Villarreal no parecía un mal mayor, sólo un resultado lógico siendo conscientes del rival que había en frente. Sin embargo, los tropiezos fueron sucediéndose hasta hoy, víspera de la 22º jornada de LaLiga Santander. Después de tantas fechas el equipo quiere recuperar la sonrisa que se dejó en Cádiz, escenario sobre el que proyectó su último gran partido.
En Andalucía, la Real Sociedad asedió a los gaditanos hasta conseguir una ajustada victoria gracias al solitario gol de Alexander Isak al 66’. Casi 15 disparos (4 de los cuales a puerta) después, los donostiarras se llevaron a casa los 3 valiosísimos puntos. Pero a partir de aquella tarde se apagó una brillante luz en San Sebastián.
La agonía, explicada
Después de su visita al Carranza el conjunto txuri-urdin perdió la lucidez en su juego y esa capacidad goleadora que sorprendió a toda Europa. Pasó de asestar goleadas a ganar o puntuar con lo justo. Gran parte de la culpa de este hecho la tienen las repetidas lesiones del que precisamente es el hombre capaz de hacer magia sobre el verde: David Silva. El canario disputó los 90 minutos de aquel partido en Cádiz, dando un recital de pases clave, de esos que hacen pupa a la defensa contraria. A veces da la sensación de que Silva tiene un imán en sus botas, tal es así que el equipo registró casi un 70% de la posesión de aquel partido, controlando por completo a su rival. Se nota que los de Imanol Alguacil echan de menos la imaginación en el último cuarto de campo para poder finalizar las jugadas.
Ya en la segunda vuelta, el equipo de Álvaro Cervera volverá a verse las caras con la Real Sociedad, aunque esta vez le tocará al Cádiz viajar hasta la otra punta del país. Con la vuelta de David Silva a la dinámica habitual del grupo, siendo posible su entrada a la convocatoria de este fin de semana, los txuri-urdin recuperan la fe. Tienen argumentos para creer en que este partido volverá a ser un punto de inflexión en la temporada, aunque esta vez para volver a la senda victoriosa a la que acostumbraron a su afición.
