El Everton buscará concretar el fichaje de Saint-Maximin por una cifra considerablemente alta
Apenas hace algunas semanas que Rafa Benitez desembarcó en Merseyside, y ya suenan rumores en torno a sus peticiones. Uno de los nombres que más ha dado qué hablar, es el de Allan Saint-Maximin. El jugador que actualmente milita en el Newcastle fue una de las grandes revelaciones de la temporada 19/20, tanto que se comenzó a construir un buen cartel en la Premier League.
Según la información que manejan los portales británicos, el Everton está dispuesto a desembolsar unas 50 millones de libras para fichar al francés. Si no se lo ha visto jugar parece una cifra excesivamente alta, pero conociendo rendimiento y su potencial, se trata de una apuesta con muy buena pinta.
Su rendimiento en Premier
Saint-Maximin llegó a las “Urracas” en 2019, procedente del Niza, a cambio de 16,5 millones de libras. Cosecha 7 goles y 11 asistencias, en 56 encuentros disputados con el elenco del norte de Inglaterra. Si bien sus números no son un escándalo, rápidamente se convirtió en el emblema futbolístico del conjunto de Steve Bruce.
El estilo de juego tuvo mucho que ver con su rendimiento. Al refugiarse en su campo y esperar el momento oportuno para contragolpear, el francés se encontró con un ambiente ideal para lucir sus mejores cualidades; el dribbling a pura velocidad y la gambeta en espacios reducidos.
Una pieza que puede encajar
Es un jugador que tiene mucho por mejorar, pero aún así aportaría recursos ofensivos que cualquier DT en el mundo querría tener en su plantel. Además, conociendo el sistema de juego que adopta Rafa Benitez, sería un fichaje ideal. Es de público conocimiento que el entrenador español prefiere los equipos sólidos antes que un “fútbol fantasía”, y Saint-Maximin es un futbolista diseñado para estos planteos tácticos.
En resumen, es una elección acertada. Los directivos del Everton saben que deberán rediseñar la plantilla, para que Benitez tenga los recursos para desplegar su idea. Sin embargo, la cifra es un punto de controversia. Tal vez el día de mañana el francés explote como una estrella mundial y el traspaso se transforme en una “ganga”, pero a priori, es un precio elevado.