El fichaje del jugador del Bologna se ha convertido en una obsesión para el equipo de Vincenzo Italiano, además de un gran argumento para conseguir retener a Dusan Vlahovic
La consigna en la Fiorentina es clara: si quieren retener a Dusan Vlahovic han de ofrecerle un equipo con objetivos ambiciosos. La directiva de la escuadra gigliati no quiere perder a su jugador franquicia en este mercado, por lo que están haciendo todo cuanto está en sus manos por evitar su partida. Actualmente, el delantero ya habría alcanzado un acuerdo con el Atlético de Madrid para aterrizar en el Wanda Metropolitano, quedando la decisión únicamente a expensas del cuadro entrenado por Vincenzo Italiano. A su vez, la propia directiva le habría ofrecido, ante el ataque colchonero, un nuevo contrato que le uniese al club hasta 2026, además de una cláusula de rescisión limitada en 80 millones de euros.
La llave para completar un tridente temible
Mientras tanto, la nave dirigida por Rocco Commisso se habría puesto manos a la obra, en busca de un nuevo socio que acompañe al serbio en el caso de que, finalmente, opte por continuar en el cuadro italiano. Tras el fichaje de Nicolás González a cambio de 23,5 millones de euros para el extremo zurdo, el principal objetivo actual sería el de reforzar la misma posición, pero esta vez la perteneciente al flanco derecho. Dentro de esa operación, el favorito por los directivos es Riccardo Orsolini. El italiano, a pesar de sus 24 años, cuenta con una trayectoria más que contrastada en la liga italiana.
De la mano del Bologna, en las últimas tres temporadas ha anotado 23 goles, siendo siete de ellos en esta última. Además, se trata de un perfil de futbolista que gusta mucho en el equipo. Un extremo que juega a pierna cambiada, muy explosivo, con gran capacidad para el regate y buscar situaciones de peligro por el interior. Su gran autoconfianza le hacen destacar y solventar acciones a menudo, aunque en muchas ocasiones es la causante de su perdición. Por otra parte, es un muy buen generador de peligro a balón parado.
Por ahora, las reuniones entre Bologna y Fiorentina no han sido ni mucho menos fructíferas. Sin embargo, teniendo en cuenta los deseos del jugador, es probable que el los próximo días acaben reuniéndose de nuevo, con el objetivo de solucionar la encrucijada. El jugador quiere cambiar de aires, y Vincenzo Italiano está deseoso de poder verle en su vestuario.