El finlandés estuvo intratable durante toda la prueba y se llevó la victoria mientras Verstappen, segundo, se convierte en el nuevo líder de mundial
Valtteri Bottas volvió a subirse al escalón más alto del podio después de una gran carrera en el GP de Turquía. El podio lo completaron los hombres de Red Bull, segundo Verstappen y tercero, Pérez. El holandés es el nuevo líder del mundial con 6 puntos sobre Hamilton, que acabó quinto después de salir undécimo. La pista mojada y los neumáticos fueron los protagonistas durante toda la carrera. La estrategia acabó siendo el factor más importante para poder lograr un buen resultado. Carlos salió penúltimo y acabó siendo octavo y piloto del día después de una carrera brillante. Por su parte, Alonso no puntuó después de verse lastrado por un accidente en la salida.
En la salida, la cabeza no cambió de posiciones. Bottas, Verstappen y Leclerc mantuvieron sus puestos en el top 3. Sin embargo, pocas posiciones por detrás, Gasly tocó a Alonso cuando el asturiano ya estaba por delante y le hizo trompear para caer casi al fondo de la carrera. Esto le costó una sanción de cinco segundos. El mismo castigo se llevó Fernando cuando se llevó puesto a Schumacher después de su incidente en la salida. Por su parte, Hamilton recuperaba posiciones poco a poco de una forma muy cauta. No quería sumar un cero y no corrió ningún riesgo innecesario.
Carlos también iba remontando puestos después de penalizar por cambio de motor. El ritmo del español era brutal y fue adelantando a coches en la curva 12 vuelta tras vuelta. Por su parte, Hamilton le metió un exterior espectacular a Tsunoda después de estar varias vueltas atascado detrás del japonés. Poco después, Stroll y Norris también se tuvieron que rendir al británico, que iba mucho más rápido que el resto si exceptuamos a la cabeza de carrera.
Hamilton y Carlos llevaban carreras paralelas y eran los únicos que le daban algo de picante a una carrera muy conservadora en lo general. Sainz volvió a adelantar en la misma curva 12 a Vettel después de una frenada impresionante. Se llegaron a tocar pero no se investigó la acción. También paso a Tsunoda en la misma curva. Hamilton, a su vez, también pasó a Gasly por la quinta plaza y se puso en busca y captura de Checo.
Con el paso de las vueltas, los neumáticos intermedios empezaron a sufrir y el ritmo de carrera de prácticamente todos empezó a ser más lento. La estrategia óptima era aguantar con esas gomas hasta que la pista estuviera para neumáticos de seco e ir a una sola parada. Ricciardo, atascado en la parte baja, optó por innovar y montar otro juego de intermedios nuevos.
Cuando Hamilton llegó a la altura de Checo, tuvieron una batalla preciosa por la cuarta posición con un paralelo que se mantuvo en las últimas tres curvas y en la recta principal. Al final, Pérez alargó la frenada en la curva 1 y le ganó esa bonita pelea a Hamilton.
Viendo que la pista no se secaba, todos empezaron a entrar a poner nuevos juegos de intermedios excepto que Vettel, que se la jugó poniendo los medios, una apuesta que no le salió bien. A pesar de que muchos llevaban nuevos neumáticos, Leclerc o Hamilton, que tardaron en parar, tampoco iban mucho más lentos que los demás. De hecho, Leclerc ya mostró su intención de completar la carrera sin parar en boxes, algo permitido en condiciones húmedas. Esta idea la siguieron Hamilton y Ocon, cuarto y octavo a falta de quince vueltas.
Leclerc terminó desistiendo después de perder el liderato con Bottas y acabó parando en boxes. Mientras, Hamilton mantenía un buen ritmo en la tercera posición sin haber parado en boxes en busca de completar la prueba sin hacerlo. Por radio reportaba que estaba bien, que iba deslizando pero que no había ningún problema. Sus tiempos le daban la razón. Sin embargo, Mercedes, pensando en el mundial, terminó parándole para evitar un posible pinchazo que le dejara fuera de los puntos. Salió quinto para poder empezar a volar con el juego de neumáticos nuevos.
Sin embargo, se quedó atrapado detrás de Leclerc y acabó sufriendo graining, lo que hizo que Gasly y Norris se acercaran por detrás. Al final, Hamilton aguantó en la quinta plaza. Con el segundo puesto de Verstappen, el holandés asalta el liderato del mundial y le mete seis puntos a su gran rival.
