El CE Sabadell ha conseguido, por fin, su primera victoria, tras 8 jornadas de liga
720 minutos han tenido que esperar los aficionados del Sabadell para poder celebrar el primer triunfo de su equipo. Es por eso que los 2.000 aficionados que se reunieron el viernes en la Nova Creu Alta estallaron de júbilo, alegría y euforia cuando el colegiado del partido señaló el final de los noventa minutos.
El Sabadell llegaba al partido en horas bajas y necesitaba la victoria como agua de mayo. El equipo no venía jugando mal, pero su efectividad cara a puerta era paupérrima. Y, aunque el equipo generaba ocasiones, los delanteros no eran capaces de concretarlas. Y, aunque la plantilla se mostraba unida y confiaba en el modelo de juego, algunos aficionados empezaban a impacientarse, porque 4 puntos en 7 partidos era una cifra irrisoria para un club cuyo objetivo es el ascenso.
El juego del Sabadell era bueno y las sensaciones eran positivas. Los pupilos de Antonio Hidalgo generaban peligro y se mostraban sólidos atrás, pero siempre terminaban fallando en los momentos claves.
Corría el minuto 81 cuando, después de una buena combinación entre Muguruza y Moha Ezzarfani, el marroquí se adentró en el área y, con un zurdazo, cruzó el cuero lejos del alcance de Falcón y el balón terminó entrando en la meta rival, tras rebotar primero en el palo.
Hubo un par de segundos de incerteza en el estadio. Después de que el balón golpeara en el poste, entre la afición se palpaba cierta incredulidad. El Sabadell había dominado el partido desde el minuto uno hasta el noventa y, por fin, veía su recompensa. La Nova Creu Alta se vino abajo para festejar el gol de los suyos.
Durante muchos partidos de este inicio de temporada, el Sabadell había hecho méritos para sacar mejores resultados. Pero la fortuna no estuvo de su lado. Si el balón se estrellaba contra el palo, este lo escupía para fuera, o el balón se paseaba por la línea de meta sin llegar a entrar. Todo era cuestión de centímetros y, por fin, el Sabadell ha conseguido poner la suerte de su lado.
Este partido debe servir como punto de inflexión para cambiar la dinámica y empezar a tirar hacia arriba y escalar puestos en la clasificación. La próxima jornada se enfrentará a un hueso duro de roer, el Atlético Baleares. Aunque el equipo isleño no podrá contar con su máxima referencia ofensiva, Dioni, que cumplirá sanción.