Desde esta semana, Osasuna va a tener que afrontar un riguroso calendario competitivo que se inicia este miércoles en el Santiago Bernabéu
Ha llegado la hora de la verdad. En apenas dos días, Osasuna comienza uno de los tramos más exigentes de la temporada en la que tendrá que darlo todo para permanecer en la zona alta de la tabla. Real Madrid, Sevilla, Real Sociedad y Atlético es la lista cronológica de rivales a los que deberá enfrentarse en las próximas semanas. Todo un reto para el conjunto de Jagoba Arrasate.
Tres salidas y una visita
El primer examen, el Santiago Bernabéu. Osasuna visita al Real Madrid este miércoles en una de las salidas más complicadas de la temporada. Los rojillos llevan sin puntuar en el Bernabéu desde la temporada 2005/06, en una temporada histórica en la que acabaron en previa de la Champions.
Actualmente, el cuadro navarro es el único equipo de LaLiga con pleno de victorias fuera de casa. Se trata del mejor visitante de toda la competición y no se lo pondrá nada fácil a los de Carlo Ancelotti.
Sin tiempo para alegrías o lamentaciones, los rojillos deberán afrontar otro duro desplazamiento. La jornada entre semana termina con otro partido de Liga en un estadio muy exigente, el Sánchez Pizjuán.
Un escenario poco favorable estadísticamente para Osasuna, en el que solo han obtenido un empate en los últimos diez compromisos que se han celebrado allí.
Para no bajar el nivel de exigencia, el primer fin de semana de noviembre El Sadar será escenario del derbi entre Osasuna y Real Sociedad, dos equipos que se conocen demasiado bien.
El conjunto txuri urdin, equipo al que se quiere ver como candidato por ganar el campeonato, visitará Pamplona después de pasar por Vigo el jueves y por el derbi ante el Athletic Club en Donosti.
Por último, después del parón de selecciones de la segunda semana se noviembre, Osasuna volverá a viajar a Madrid, pero en este caso al Wanda Metropolitano, donde la pasada campaña hizo sufrir al Atlético para lograr tres puntos vitales en su lucha por el campeonato liguero.
En definitiva, cuatro partidos frente a adversarios de superior nivel teóricamente, ante los que no hay mucho que perder y a los que se puede dar más de un susto si los de Arrasate mantienen el nivel que han mostrado hasta ahora.
