El Levante fue apabullado por el Granada con un contundente 0-3, lo que ha hecho que los granotas hayan entrado en una situación crítica
El Levante no carbura. Las 12 primeras jornadas de liga han supuesto un auténtico dolor de cabeza para las filas granotas, tanto para la plantilla como para la dirección deportiva. Una de las consecuencias fue la destitución de Paco López y su sustitución por Javier Pereira. No obstante, el equipo ha continuado con su mala dinámica durante los tres primeros partidos del nuevo técnico en el banquillo de Orriols.
¿Qué falló contra el Granada?
El Levante-Granada fue uno de los muchos partidos en los que la imagen de los granotas ha sido paupérrima. Los errores tácticos han llevado al Levante a no ser capaz de ganar un partido de los últimos 20. La defensa es uno de los puntos más débiles de equipo, puesto que es el equipo que más goles ha encajado en la presente competición liguera (23). De hecho, el Granada, que no destaca por su faceta goleadora, fue capaz de marcar 3 goles en el Ciutat de València.
Una de las facetas defensivas en las que el Levante es un equipo realmente débil es el balón parado. De nuevo, los de Orriols volvieron a encajar en un córner. Un córner, errores defensivos inadmisibles, individualidades contrarias que los defensas no son capaces de detener… los problemas del Levante son críticos, y el runrún de un descenso empieza a hacerse notar entre la afición.
La alineación del Levante
El Levante es un equipo que está sufriendo muchas bajas por lesión en esta liga. Esto hace que el entrenador tenga que encontrar el mayor equilibrio posible a la hora de alinear a sus jugadores. Pero, contra el Granada, Pereira trató de innovar en determinadas posiciones, pero el resultado fue horrendo. Clerc de central y De Frutos de carrilero fueron inventos que no funcionaron. La reinvención del esquema a lo largo del partido tampoco dio resultados positivos.
¿Cuál es el rumbo del equipo?
El Levante tiene un gran problema. Por plantilla, el equipo debería estar mucho más arriba. Por calidad, el Levante ha demostrado que puede plantarle cara a cualquier rival. Atlético, Barça, Real Madrid… todos ellos se han dejado puntos contra el Levante en los últimos años. El problema llega cuando los granotas se enfrentan a rivales directos en la liga.
El Levante no es capaz de sacar una buena cantidad de puntos cuando se enfrenta a estos equipos, lo que lastra sus posibilidades de soñar con grandes objetivos. Hasta que el Levante no pueda competir de tú a tú con cualquier equipo, peligrará su mantenimiento en la categoría.