El guardameta alemán atraviesa uno de sus peores momentos como portero azulgrana, donde encaja más goles de lo habitual
Marc-André Ter Stegen ha sido uno de los mejores porteros del mundo, pero ahora no lo es. Tiene enormes cualidades para ser el portero titular del Barça, pero ahora mismo no las está explotando. El alemán ha dejado de ser determinante y es uno de los más señalados, ya que se habla más de él por los goles encajados que por sus paradas, y eso no es buena señal.
Demasiados goles y malas sensaciones
El guardameta alemán ha dejado de ser decisivo. Cuando los rivales crean ocasiones claras, ya no tiemblan al llegar a la portería. Parece que no es tan imprescindible como antes. Los culés ya no confían en Marc. Y, ahora mismo, hacen bien.
Esta temporada Ter Stegen ha disputado 22 partidos, entre Liga y Champions, en los cuales ha encajado 28 goles y solo ha dejado la portería a cero en 6 ocasiones. Parece que, al igual que el muro de Berlín, el muro Ter Stegen ha caído.
Ya no es solo por las cifras, que no acompañan. También es porque ya no transmite esa sensación de seguridad y sangre fría a la que nos tenía acostumbrados, con paradas imposibles o intervenciones salvadoras. Y un portero del Barça tiene esa responsabilidad, la de salvar al equipo cuando hace falta.
Las lesiones, un gran lastre
El mayor problema que ha arrastrado al ex del Borussia Monchengladbach a la situación actual son las lesiones. El portero titular del FC Barcelona ya empezó la temporada con mal pie, teniendo en cuenta que una operación en su rodilla izquierda le dejó K.O todo el verano y no pudo hacer la pretemporada con el equipo.
Con esta, ya son 20 las lesiones que ha sufrido el guardameta alemán. Veinte. Una cifra considerable de contratiempos para un futbolista con apenas 29 años de edad, teniendo en cuenta la longevidad de los porteros respecto al resto de jugadores. El principal inconveniente ha sido esa rodilla izquierda, la que le ha frenado hasta en 7 ocasiones y parece que no cesa con el tiempo.
Aun así, no hay que dar por perdido a Marc-André Ter Stegen. Uno de los artífices del triplete de Luis Enrique y uno de los héroes de la Champions conseguida en Berlín puede volver a ser el mejor portero del mundo, si recupera la confianza y le respetan las lesiones.