El extremo francés del Barcelona suma ya once pases de gol esta temporada, pero su continuidad en el club sigue en el aire
Ousmane Dembélé llegó al FC Barcelona el verano de 2017 para ayudar a suplir la marcha de Neymar Jr. El habilidoso extremo francés ilusionaba a la afición culé y mostraba una gran proyección, tanto que el club pagó un importe inicial de 105 millones de euros al Borussia Dormundt para incorporarle.
Casi cinco años después, el contrato de Dembélé llega a su fin sin que nadie tenga la sensación de haber amortizado su asotronómico precio. El paso por el Barça del francés ha estado marcado por repetidas lesiones y una clara falta de compromiso que puso a la afición en su contra.
Así, cuando, una vez cerrado el mercado hivernal, parecía que, con total seguridad, Ousmane Dembélé dejaría el Barcelona a precio cero, los culés mostraron su enfado con pitos en el estadio. De hecho, se debatió –y mucho– sobre si el francés debía, o no, volver a jugar con la elástica azulgrana.
Dembélé se sube al barco
Sin embargo, Xavi Hernández parece haber recuperado a Ousmane Dembélé, que está jugando a un gran nivel. Cuando más lejos del club estaba el ‘7’, se ha vuelto a subir al barco del Barcelona y empieza a ser un fijo en los onces del equipo.
El francés, de 24 años, promedia una asistencia cada 85 minutos en Liga, sumando once pases de gol en 929 minutos jugados. Su desequilibrio y habilidoso regate aportan, además, desborde y verticalidad al cuadro azulgrana. Xavi lo ha defendido siempre y ahora Ousmane le responde en el campo.
Hay aún facetas, sin embargo, que Dembélé puede y debe mejorar. La toma de decisiones –sobre todo si se tiene en cuenta el estilo del Barça– es quizás el aspecto en qué el francés tiene que trabajar más. Asimismo, sus centros y juego un tanto anárquico son otras cuestiones a pulir. Esta temporada tampoco se ha visto al Dembélé más goleador. El francés tan solo suma dos tantos este año, uno en Liga y el otro en Copa.
Futuro incierto
El porvenir de Ousmane Dembélé es, a día de hoy, tan misterioso como su juego. Es muy complicado determinar si va a quedarse en el Barcelona o si, por el contrario, se marchará gratis a otro club. Manchester United, PSG o Liverpool se han interesado en el jugador y pueden ofrecerle un sueldo muy superior al que tendría en Barcelona.
Hace meses, su salida parecía tan solo cuestión de tiempo. Pese a esto, el francés parece contento con Xavi y ha transformado los pitos en aplausos. Así, hay aún esperanza en Barcelona sobre la renovación de Dembélé que, ahora sí, es vista con buenos ojos por muchos aficionados.
El contrato del francés termina en junio. Si no se le ata antes al club, se marchará gratis en busca de nuevos horizontes. Por su coste y todo lo que aporta al equipo se han reabierto las negociaciones para su renovación, ya dadas por cerradas des de la directiva.
Así, tan solo el tiempo dirá donde jugará Dembélé la próxima temporada. En el Camp Nou se vuelve a creer en el francés como uno de los líderes del ‘Dream Teen’, y si las lesiones le respetan y el jugador sigue comprometido, no hay ninguna duda que puede ser clave en el Barça.
