El RCDE de Vicente Moreno, pese a perder, firmó una gran actuación en el siempre complicado Wanda Metropolitano
El RCDE Stadium está siendo un fortín, y es que de solo contar las actuaciones en casa, el cuadro perico estaría en posiciones europeas (7º), algo que ocurre a la inversa en lo que le concierne como visitante; rozaría el descenso y solo suma una victoria en lo que llevamos de Liga. Pese a lo desastroso de los registros la verdad sobre el campo fue diferente el domingo: un gran Espanyol fue combativo y pudo plantarle cara al Atlético de Madrid.
El cambio de sistema fue clave
Vicente Moreno se desarraigó del ya archiconocido 4-5-1 para dar paso a una defensa de 5, la cual se convertía en defensa de 4 en las transiciones y que tuvo de puntas de lanza a RDT y Puado, una dupla de ataque para nada desdeñable. El regreso de Sergi Gómez, junto al gran momento de Calero y la solidez de Cabrera, permitieron al RCDE ser un muro infranqueable durante gran parte del encuentro.
La nota negativa fue la poca conexión de RDT con el centro del campo, algo que viene siendo habitual esta temporada –suele estar forzado a retrasar mucho su posición para recibir- , algo que lastró al equipo en las transiciones ofensivas pero que se pudo compensar con dos carrileros muy prolíficos en ataque.
Grandes sensaciones a pocos partidos del final
La victoria de la semana pasada contra el Celta (1-0) y la buena actuación de los de Vicente Moreno en el Wanda, hacen soñar sobre una utópica zarpada del cuadro blanquiazul a su diferencia con la zona europea -39 del RCDE por 52 del Villarreal- contando que aún quedan partidos en casa y que el equipo está funcionando bien. Sería una gesta histórica pero lo cierto es que a partir de ahora cada punto cuenta a nivel económico.
El RCDE, ya salvado, ha hecho olvidar a mucha gente que este equipo el año pasado jugaba en segunda división y eso, con lo positivo y lo negativo, habla bien del cuadro perico.