Tras la dinámica negativa que acumulaba el conjunto culé, dicen prácticamente adiós a la consecución del título liguero
El FC Barcelona acumulaba una racha de 15 partidos sin conocer la derrota en la Liga, pero no pudo aguantar la presión y acabó pinchando. Tras los excelentes resultados obtenidos en partidos de máxima exigencia, el Eintracht Frankfurt y el Cádiz cortaron las alas del conjunto de Xavi, el cual iba en una dinámica completamente ascendente y con ganas de más.
Pese a tener un partido menos que el Real Madrid, a día de hoy se encuentran a 15 puntos del liderato, lo que supone una diferencia muy grande y difícil de atrapar. No obstante, el presidente del Barça, Joan Laporta, siempre se ha mostrado optimista y positivo en poder lograr lo que sería algo histórico jamás visto. Para ello, el equipo dirigido por Xavi tendría que ganar todos los partidos restantes y el equipo blanco dejarse puntos en la gran mayoría de ellos.
Asimismo, Xavi ya ha comentado en varias ruedas de prensa cual es el principal objetivo de esta temporada: clasificarse para jugar la Champions el año que viene. Si bien es cierto, la consecución de la Europa League habría supuesto estar en el bombo 1 de la competición europea, un ingreso de alrededor de 15M de euros y la posibilidad de disputar el partido que enfrenta al campeón de la UEFA Europa League con el de la Champions, la Supercopa de Europa.
Nunca es tarde, si la dicha es buena
Desde que el entrenador egarense regresó a la Liga, el Real Madrid ha disputado tan sólo un partido más que el Barça en los que ha sumado 39 puntos, producto de doce victorias, tres empates y dos derrotas. Por lo que, si el partido de esta noche que enfrenta al Barça con el Rayo Vallecano acaba con victoria local, el conjunto culé superaría al Madrid en la clasificación hecha desde el regreso de Xavi como entrenador.
Esta clasificación sirve de poco, por lo que se refiere a pelear el campeonato, pues el Real Madrid parece no tener la intención de dejarse ningún punto por el camino que posibilite la pérdida del título liguero. En el mundo del fútbol no hay imposibles y más cuando se trata de un equipo como el FC Barcelona, pero pueden estar muy satisfechos del salto de calidad que han logrado.
La progresión del equipo ha ido claramente en línea ascendente, pero ya no solo en términos de resultados. El equipo catalán se está acercando a su mejor nivel de juego, aquél que le hizo exitoso y sorprendió al mundo entero. Cada vez más, los jugadores entienden aquello que le pide Xavi, las bases e ideas del modelo de juego que le hizo grandes. La afición lo nota, sabe que el equipo ha mejorado notablemente y está muy ilusionada por los años que están por venir.
El futuro más próximo
Los azulgranas tienen la obligación de ganar esta noche frente al Rayo Vallecano, pues una victoria les afianzaría en la segunda posición y, por ende, una plaza en la Champions del año que viene. Una victoria supondría un margen de nueve puntos respecto al equipo que marca la zona europea, el Real Betis, a falta de cinco jornadas.
El Barça llega muy mermado físicamente a este tramo final de la temporada, es evidente que los últimos años no se ha trabajado en profundidad la condición física y está pasando factura. Este cansancio se hizo evidente en el último enfrentamiento ante la Real Sociedad, pues el partido se alargó hasta el minuto 100 y los jugadores tenían notables molestias.
Al parecer, todos los jugadores que acabaron con molestias en el partido que se disputó en el Reale Arena, estarán disponibles para el encuentro de esta noche en el feudo azulgrana. Solamente faltaría saber si están en condiciones para salir de titular o, por el contrario, tendrían que ser sustituidos por jugadores con menos minutos en el equipo.
Con este partido, intentarán poner fin a la racha de dos partidos seguidos perdiendo en casa y afianzarse en el objetivo. Por su parte, el equipo dirigido por Iraola, después de la victoria ante el Espanyol, querrá seguir sumando triunfos y alejarse de las zonas rojas de la clasificación.