Parece que el FC Barcelona no encuentra su juego idóneo para hacer que todos los jugadores del once de Xavi Hernández estén cómodos
El FC Barcelona de Xavi comenzó siendo un equipo basado principalmente en rápidas transiciones ofensivas después de recuperar el balón. A menudo busca un delantero que efectúe tempranas carreras a espaldas de la retaguardia.
Si no encuentra un pase a los delanteros, al menos han generado un espacio en el centro para que los cuatro jugadores del mediocampo actúen. Esto dejaba a la defensa rival obligada a jugar en bloque bajo para cerrar las carreras a su espalda de los delanteros.
¿Qué busca el equipo en fase ofensiva o cuando se salga de una presión con el balón jugado?
También es habitual que los centrocampistas ofensivos, en este caso podrían ser tanto Pedri como Gavi, realicen incursiones por dentro, a menudo jugando a pie cambiado para proporcionar una amenaza más directa sobre la portería.
En el modelo del Barça, el nueve y el mediapunta también intercambian sus posiciones para sacar a los defensores de posición, esto es algo que se ha visto siempre que Pedri juega de mediapunta y Luuk de Jong de punta.
El uso del mediocampo es la punta del equipo, se busca el repliegue para formar un doble pivote organizado por Busquets y Frenkie de Jong. Con esta disposición se puede habilitar más espacio en los pasillos interiores para que el delantero centro se desplace hacia fuera y cree peligro en área rival.
¿Qué ocurre cuando el equipo pasa a una fase defensiva o de presión al equipo rival?
Cuando los de Xavi Hernández están sin balón, defienden de una forma muy definida. La intensidad, ritmo y la alta variabilidad en los ajustes sin balón se dan con una presión alta dirigida por el punta y los dos extremos, posiciones que suelen ocupar Aubameyang y Ferran Torres.
Por último, el bloque central del mediocampo juega de forma que se cree un pasillo estrecho y corto alrededor del balón. Es una estructura para que cada jugador ejerza una presión individual al rival y bloquear el balón en el centro del campo y evitar una salida rápida de balón o un contragolpe.
