El mediapunta de Talavera de la Reina, Óscar Rodríguez, ha firmado su contrato con el Celta tras unas temporadas un tanto flojas
En las últimas horas se ha acelerado la operación salida en el Sevilla. Y se confirma otra nueva marcha más de la entidad hispalense. En esta ocasión es Óscar Rodríguez quien no vestirá la elástica sevillista. De hecho, ya se ha hecho oficial su llegada al Celta. La operación se cierra en una cesión con opción de compra. Dicha posibilidad rondaría los diez millones de euros, para abonarlos al finalizar el curso, siempre y cuando se quieran quedar con sus servicios de forma definitiva.
Tras la marcha de Brais Méndez a la Real Sociedad, el Chacho Coudet demandaba un nuevo jugador con capacidad creativa. Así como que también pueda jugar en varias posiciones. Estas son características con las que cuentas Óscar Rodríguez. De hecho, si por algo destaca el talaverano es por su trato de balón. Su excelso golpeo fue el detonante de su fichaje por el Sevilla. Aunque su estancia en territorio sevillano no ha sido para nada fructífero.
Llegó a Sevilla en el verano de 2020. Lo hizo procedente del Real Madrid, tras una gran temporada como cedido en el Leganés. En 32 partidos en su segunda etapa como pepinero, anotó nueve goles y dio dos asistencias. No obstante, en el Sevilla, en los dos cursos que ha pasado allí, sus registros han empeorado considerablemente. La primera temporada se saldó con dos goles y dos asistencias en 29 partidos. Mientras que la segunda ni marcó ni asistió en quince choques. Y, en invierno salió cedido al Getafe, donde, en 18 encuentros, tan solo pudo asistir una vez.
Todos los veranos se especulaba con una posible salida de Óscar Rodríguez, estuviese en el equipo que estuviese. Infinidad de equipos se han interesado por sus servicios estos años, desde el Valencia, hasta el Getafe o incluso conjuntos de la Premier League. Aunque, finalmente, ha sido el Celta del Chacho Coudet quienes se han hecho con él. Por tanto, el preparador argentino se ha marcado recuperar a aquel jugador que parece que se quedó en Butarque.
