Tras un último mes y medio duro para el equipo, el parón viene bien a los béticos para hacer piña y recuperar sensaciones y a los lesionados
Hasta el inicio del mes de octubre, el Betis había jugado ocho partidos entre liga y Europa League y había ganado siete de ellos. En cambio, desde que empezó el mes de octubre, parece que a la plantilla verdiblanca empezaron a pesarles las piernas. Ocho partidos ligueros en los que solo ha conocido la victoria en dos de ellos puso en alarma a un Pellegrini que parecía haber encontrado una dinámica ganadora a excepción del partido en el Bernabéu.
Si bien el equipo ha conseguido en el mes de octubre victorias importantes como la de Roma, que le garantizaba la primera plaza del grupo, o la de Anoeta frente a la Real, que es un rival directo, los rivales que en principio son más asequibles se les han atragantado. Las derrotas ante el Celta, Valencia y Atlético fuera de casa son comprensibles. Pero el equipo se ha dejado puntos ante rivales teóricamente asequibles como Valladolid, Cádiz y Sevilla.
Quizá esta última sea la que más duele. El hecho de no haber aprovechado el mal momento de forma del máximo rival ha hecho que el empate conseguido sepa a derrota. Es cierto que el equipo se vio en inferioridad tras las expulsiones de Fekir y Borja, pero se siente como una oportunidad perdida de poder haber hecho sangre.
Muchos factores en contra
Algo que desde el inicio de la temporada ha lastrado al Betis han sido las expulsiones. Sin tener un juego especialmente duro, el equipo de Pellegrini se encuentra el primero en expulsiones en la liga con siete tarjetas rojas. Solo se acercan a los béticos Sevilla y Getafe con 6.
Pezzella ha sido expulsado frente a Osasuna y Valladolid, Luiz Felipe frente al Celta, Edgar frente al Valencia, Canales frente al Cádiz y Borja y Fekir frente al Sevilla. Hasta en 4 ocasiones el equipo se ha quedado sin central durante el encuentro y cinco de las siete expulsiones han sido antes de la hora del partido. Este es un factor que, aun siendo los jugadores los únicos culpables, ha condicionado notablemente el rendimiento bético.
Otro factor condicionante de la temporada del Betis han sido las lesiones. Además de Camarasa, que inició la temporada lesionado, Pellegrini ha tenido que gestionar las bajas de Canales, Bravo, Luiz Felipe, Joaquín, Juanmi y Sabaly y Fekir en dos ocasiones. Estas lesiones han provocado que el técnico chileno haya podido contar con su once ideal en apenas un par de jornadas al inicio de la temporada.
Vuelta tras el mundial
Tras el mundial, Pellegrini recibirá a los internacionales que se marcharon a Catar. William Carvalho, Guido, Guardado, Pezzella y Sabaly volverán a ponerse a las órdenes del mister una vez acabada su participación mundialista. El hecho de que solo estos cinco jugadores pongan rumbo a Catar es una ventaja para el equipo, ya que en los múltiples amistosos que disputarán en el parón, el ingeniero podrá disponer de la mayoría de sus piezas.
Además, en enero se espera que Camarasa por fin regrese de su lesión y que Juanmi esté recuperado de su lesión de tobillo. Que la plantilla esté sana y al completo puede ser una de las claves de la recuperación y vuelta a la senda del triunfo por parte del Betis. Los verdiblancos volverán a la rutina frente al Athletic Club ante a su gente y será el momento de medir qué tan bien le ha sentado al equipo el parón mundialista.