La dirección blanquiazul ha oficializado la salida del director deportivo, Domingo Catoira, después de 3 temporadas en la entidad catalana
Era una salida anunciada pero faltaba la oficialidad: el RCD Espanyol ha prescindido en un escueto comunicado de su hasta hoy mismo Director Deportivo, Domingo Catoira.
Seguramente hoy sea un día ajetreado en las oficinas del RCDE Stadium (renombrado como Stage Front Stadium). Y es que se ha concretado la noticia que muchos pericos esperaban: Domingo Catoira ha sido cesado. La nefasta gestión de la plantilla, así como la planificación errónea han abocado a un Espanyol vacío –y de reacción tardía- al descenso.
La caída de Catoira cierra la era Rufete, puesto que ambos compartían tareas en la Secretaría Técnica, figura estrechamente ligada a la Dirección Deportiva. Una gestión errática que se ha visto materializada en cesiones y traspasos sin sentido y de alto coste deportivo y económico. Las dos buenas noticias del año, Joselu y Oliván, fueron cerradas por Rufete, por lo que el resto de incorporaciones, obra de Catoira, no han dejado apenas buen rendimiento (salvo Montes)
El caso ‘RDT’ sentenció a Catoira
La gestión en la salida de Raúl de Tomás, hasta el momento estandarte del equipo (y Zarra de la temporada pasada) fue la gota que colmó el vaso: el delantero se fue por una irrisoria cantidad de 8 millones (con un valor de traspaso de 25 millones) y por la puerta de atrás. Ni Diego Martínez ni Catoira supieron reconducir una situación en la que se podría haber logrado un desenlace mucho más lucrativo
La portería: un cúmulo de despropósitos
La portería ha sido otra de las polémicas del ya ex-director perico: no renovó a Oier y Diego López, logrando la cesión de Lecomte (se fue en invierno) y la de Álvaro Fernández. Su desconfianza en la cantera y la mala actuación de los guardametas hicieron que el Espanyol tuviera que fichar a Pacheco por 3 millones. La llegada de David Férnandez, ex miembro del club, actual ayudante de Mateu Alemany y antiguo director de la ‘Fábrica’, buscará, de concretarse, reimpulsar el club a todos los niveles.