Un partido entretenido que acabó con empate (1-1), gracias al gol de Stuani, dejó buenas sensaciones en ambos conjuntos que siguen preparándose para esta temporada
El Girona FC afrontó el quinto amistoso de pretemporada sabiendo que en frente tenía un rival más complicado que los anteriores. Nada de Segunda Federación o equipos de segundo nivel ingleses.
Ahora tocaba jugar contra el Napoli, ganador de la Serie A italiana con mucha diferencia. A pesar de la diferencia, el Girona plantó cara y aunque quizás el empate parezca demasiado premio, el equipo supo defenderse. El gol de Stuani llegó tras un error defensivo que el goleador supo aprovechar.
Un comienzo impreciso de partido
El público asistente al Teófilo Patini debió esperar para ver en acción al campeón italiano. Y es que, los primeros 30 minutos del encuentro estuvieron dominados por la imprecisión en ambos lados.
Justamente el gol de Stuani, a los 11 minutos, provino de un grosero error de Leo Ostigard. El noruego intentó jugar con su portero, sin advertir la presencia del goleador histórico del club catalán. Éste, al recibir, sólo necesitó eludir a Gollini para establecer el 0-1 parcial.
El gol le dio algo de tranquilidad al Girona, que intentó hacer su juego de siempre. Toque y desmarque, para llegar por medio del pase. Jastin, jugando como delantero neto, estuvo más incisivo por la izquierda que Savinho por la derecha, que recién se pudo soltar un poco en los últimos diez minutos del primer tiempo. De a ratos, el juvenil se asoció con Miguel, pero abusó de la jugada personal y por eso sus intentos murieron en la línea de defensa napolitana. Sólo una vez pudieron combinarse brasileño y catalán, y la jugada terminó en un débil remate del segundo. Así era muy difícil que pasara algo. Abajo, Aleix García fue salida y la defensa estuvo sólida. Chuchy Lozano y Giovanni Simeone casi nunca se pudieron encontrar.
El ‘Cholito’ igualó la contienda
Simeone fue el que empató el partido a los 40 minutos. Remató soberbiamente (fuerte y al ángulo) un penal cobrado por infracción de Arnau sobre Zerbin. El penal, aunque discutible (no pareció falta del defensa) vino a coronar un período en el que Napoli fue claramente superior al Girona. Comenzó con un error en la salida del Girona, una desinteligencia entre Juan Carlos y Arnau que no aprovechó el Chucky, ya que la defensa reaccionó rápido. Un minuto después lo tuvo el propio Chucky, tras corrida de Zerbin y pase atrás, pero el mexicano remató demasiado alto. El Girona terminó la primera parte pidiendo la hora y agradeciendo que no hubo tiempo de descuento.
En el segundo tiempo aparecieron los espacios. El Napoli siguió dominando, como si no hubiera habido una interrupción en el juego. Llegó varias veces al área gironina, y ahí fue cuando la defensa visitante mostró su fortaleza. La primera clara fue de Simeone, pero tapó bien Juan Carlos. Míchel hizo ingresar a Yan Couto por Tsygankov, para dar más equilibrio al mediocampo, pero los italianos siguieron atacando y prevaleciendo.
Aparece el campeón
En el minuto 59 el DT de Napoli renovó casi todo el equipo. Sólo se salvaron Jesús y Lozano. Ingresaron varias de las figuras del equipo campeón de Italia entre ellas Kvaratskhelia. El georgiano fue un problema para el Girona FC: ubicado bien abierto sobre la izquierda, recibió siempre solo y, fuera recortando hacia adentro o corriendo por la banda, hizo sudar la gota gorda a Yan Couto. Entraron también Politano, Raspadori y Zielinski.
El campeón de Italia decía presente. Juan Carlos debió intervenir ante Kvaratskhelia, Politano, y Di Lorenzo, que asociándose por derecha lograba llegar a posición de gol. Fueron varios sobresaltos los que debió padecer el conjunto catalán, que contestó con los ingresos de Iker Almena y Manu Vallejo por Savio y Stuani, intrascendentes, y más tarde de Silvi Clua Oya por un cansado Aleix García.
Promediaba el segundo tiempo y el partido era golpe por golpe, aunque siempre dio la sensación de que el Napoli tenía más chances de marcar. Hubo una situación en la que Arnau pareció cometerle penal a Kvaratskhelia, pero a la postre fue juzgado, correctamente, como un contacto propio del juego.
Al final, una sorpresa
Sobre el final llegaron algunas ocasiones para Girona. La más clara fue una contra comandada por Yan Couto, que fue quien terminó rematando apenas afuera. La nota del cierre la dio el árbitro, que mientras los jugadores se retiraban, los hizo volver para disputar una definición por penaltis. En las graderías no entendían nada. Pero al final hubo algo más de entretenimiento. El Girona se impuso por 3-1 en los penaltis.
Girona FC redondeó un partido agitado, en el que le costó realizar su juego. Fue el partido más exigente de la pretemporada, ante un equipo campeón y con un plantel de primer nivel, que quizás haya merecido un poco más. Pero salvó el invicto de la pretemporada. Ahora buscará extenderlo en el amistoso del sábado contra Lazio, partido que tendrá como condimento el reencuentro del Taty Castellanos con sus ex compañeros.
ACTA DEL PARTIDO
Napoli: Gollini (59’ Rahmani); Zanoli (59’ Di Lorenzo), Ostigard (59’ Olivera), Jesús, Obaretin (59’ Zielinski); Zedadka (59’ F. Anguissa), Elmas (59’ Raspadori), Folorunsho (59’ Kvaratskhelia), Zerbin (59’ Meret); Lozano, Simeone (59’ Politano).
Girona: Juan Carlos; Arnau Martínez, Daley Blind (ST Callens), David López (47’ Iván Martín), Miguel; Tsygankov (47’ Yan Couto), Aleix García (74’ S. C. Oya), Yangel Herrera (61’ Manu Vallejo), Savio (61’ I. Almena); Stuani (61’ Pau Victor), Jastin (47’ Bernardo).
Goles: 11’ Stuani (G), 40’ Simeone (N).
Estadio: Teófilo Patini (Castel di Sangro, Napoli, Italia).