El Cívitas Metropolitano dictará sentencia, en una eliminatoria aún abierta y donde los pronósticos no son claros, pero al Atlético solo le vale ganar para estar en cuartos
El Atlético de Madrid se jugará más de media temporada a un solo partido. La vuelta de los octavos de final, que les enfrenta a un coloso como el Inter de Milán es una de sus últimas balas para tratar de mejorar una temporada marcada por los numerosos traspiés acontecidos lejos del Cívitas Metropolitano.
Simeone, quién conoce de muy buena mano lo que son las eliminatorias a doble partido, nunca ha perdido un partido de eliminatoria europea en casa. A eso se agarran los futbolistas, y a su bastión que han conformado en las pedanía de San Blas.
La ida dejó un resquicio de vida al Atlético de Madrid
En el partido acaecido en el Giusseppe Meazza italiano, el Atlético salió con vida en un encuentro dominado en gran parte por el buen hacer de los hombres de Simone Inzaghi. Simeone ideó un plan donde resistir y sacar un empate de un estadio que es otro bastión, era la mayor victoria que podía ocurrir para los rojiblancos.
En gran medida, consiguieron contener las intentonas de Lautaro Martínez y Marcus Thuram (quién se retiró lesionado en aquel encuentro), pero un minúsculo error en la salida de balón permitió al Inter llegar a Madrid con una mínima ventaja gracias al gol de Arnautovic. Witsel se mostró como el capitán general de la defensa, y en líneas generales, el Atlético jugó de tú a tú con el Inter, pero no se pudo contener a un equipo que es una roca sólida y tan estructurada como el conjunto neoazzurro.
Pese a ello, el Atleti se sitúa tan solo a un gol de igualar la eliminatoria, y ahora toca decidir todo en su campo, donde tan solo el Athletic Club (en la ida de semifinales de Copa del Rey) y el Getafe (3-3 en Liga) han conseguido resultados positivos. El factor campo será decisivo para resolver esta eliminatoria y en el Metropolitano hace semanas que se colgó el cartel de ‘sold out’.
El Inter, todo victorias en 2024
Pero, si algo hace temer a los de Simeone, es la contundencia y la solidez del Inter esta temporada. Como dato a relucir, son las 13 victorias consecutivas (entre Liga, Supercopa y Champions League) que encadenan este 2024. Aún no conocen ni siquiera lo que es el empate, y ese dato les da una mínima ventaja en el global.
Para encontrar la última derrota del conjunto de Inzaghi, tenemos que retornarnos al 20 de diciembre, donde cayeron eliminados en octavos de la Copa italiana a manos del Bolonia (1-2), en un encuentro marcado por las rotaciones. Anteriormente, y tan solo una vez más, cayeron derrotados en lo que llevamos de temporada, y fue en septiembre ante el Sassuolo (por el mismo resultado, 1-2).
Y, es tal la ventaja que llevan en la Serie A (16 puntos sobre el AC Milán), que pudieron acometer numerosos cambios en su once inicial en el último encuentro disputado en el feudo del Bolonia. Vencieron, gracias a un solitario gol de Yann Bisseck. Y se encuentran a tan solo cuatro victorias más de proclamarse campeones de su liga. Un auténtico titán que visitará el Cívitas Metropolitano en busca de su billete a cuartos de final de la máxima competición europea.