El joven delantero no logra consolidarse en la Premier y su regreso al Barça plantea más dudas que certezas
Ansu Fati, la joven promesa del FC Barcelona, enfrenta uno de los momentos más difíciles de su carrera tras un periodo de cesión poco productivo en el Brighton & Hove Albion. A sus 21 años, su futuro se ve más dudoso que nunca, sumido en una temporada para olvidar en la que ha desaparecido prácticamente de los planes del técnico Roberto De Zerbi.
Campaña para el olvido
Desde su llegada a la Premier League, las expectativas eran altas para Fati, quien salió cedido en busca de minutos y continuidad que no encontraba en el Barça bajo la dirección de Xavi Hernández. Sin embargo, el cambio de aires no ha traído los resultados esperados. A pesar de iniciar con oportunidades, su participación ha ido decreciendo alarmantemente, siendo excluido de las convocatorias en los últimos encuentros contra equipos como Bournemouth y Manchester City.
El delantero solo ha conseguido sumar poco más de 1.000 minutos en todas las competiciones, con un saldo de cuatro goles y ninguna asistencia. Su último registro data de noviembre, un gol en la Europa League contra el Ajax, lo que subraya una sequía preocupante en términos de aportación ofensiva. Roberto De Zerbi ha sido crítico respecto al estado de forma de Ansu, justificando su omisión por la necesidad de mejorar físicamente.
Futuro incierto
El futuro inmediato de Ansu Fati parece alejarse de Brighton, y su retorno a Barcelona no asegura una situación más favorable. A pesar de su talento, el joven delantero no ha logrado convencer a Xavi de que merece un lugar valioso en su esquema táctico. Además, la situación económica del Barça y las estrictas normativas financieras de La Liga complican aún más su permanencia en el club catalán.
Jorge Mendes, su agente, se encuentra ya en la búsqueda de un nuevo destino para Ansu, esperando encontrar un equipo que pueda ofrecer una continuidad necesaria para resucitar su carrera. Este verano será crucial para el futuro del joven, quien aún tiene tiempo para recuperar su mejor versión y demostrar que los destellos de brillantez mostrados en sus primeros años no fueron meras casualidades.