El campeón del mundo deja la puerta abierta a cualquier opción, incluso fuera de la fábrica japonesa.
Tras unos años complicados, HRC se ha intentado adaptar al estilo de motos de última generación, pero están teniendo uno de los inicios de temporada más complicados de su historia. Está siendo la fábrica que menos puntos tiene, con tan solo 27, estando al fondo de la parrilla en la mayoría de las carreras.
Sin embargo, no es un problema de pilotos, ya que su equipo oficial cuenta con una pareja muy interesante, una de las más potentes de la parrilla. Cuentan con el talentoso piloto italiano Luca Marini y el campeón del mundo Joan Mir.
La filosofía de temporada 2024 de Honda siempre es el trabajo duro, intentándose recuperar y conseguir una moto competitiva para un futuro. En el paddock muchos opinan que no van a llegar a tiempo para esta temporada, y con muchas dudas para las siguientes.
La filosofía del equipo es extraña, desde hace mucho tiempo. Todo tiene que pasar por los ‘headquarters’ de Japón, donde se producen todas las piezas y cambios de moto. Esto supone un inconveniente por los tiempos de espera para llegar a todos los Grandes Premios.
Luca Marini siempre ha ido en la línea de trabajo de Honda, que, aunque aún no haya puntuado, está haciendo muy buen trabajo con los datos del equipo. También muestra un gran compromiso con la fábrica, llegando a decir que se va a quedar, mínimo, hasta que sea campeón.
El mal momento para Mir
Sin embargo, la sorpresa la ha dado Joan Mir, campeón del mundo, dando unas declaraciones incendiarias sobre el equipo, en el canal de Youtube de Nico Abad. Preguntado por el diseño de la moto de este año, dice que “no gira, no tiene agarre y no corre” de forma muy contundente. También comenta que no sabe qué hacer en el futuro, pero que tiene sobre la mesa las tres opciones; renovar con Honda, buscar otra fábrica o irse a casa.
Veremos cómo afecta esto a la temporada del equipo japonés, y qué decisión a futuro toman.
