El tenista murciano hizo historia este pasado domingo en la Pista Philippe-Chatrier de París tras imponerse al alemán, Alexander Zverev, en la final de Roland Garros
Carlos Alcaraz ha inscrito su nombre en la historia del tenis mundial tras su reciente victoria en el prestigioso torneo de tenis francés. A sus 21 años, el español se ha convertido en el primer tenista de su generación en ganar un título Grand Slam en las tres superficies del tenis: hierba (Wimbledon 2023), pista dura (US Open 2022) y tierra batida (Roland Garros 2024). Su triunfo en París no solo representa su primer trofeo en el Grand Slam de Roland Garros, sino también un logro excepcional que subraya su capacidad para adaptarse y salirse en cualquier situación.
Un camino lleno de desafíos
El camino hacia el título no fue fácil para Alcaraz, quién tuvo que superar a varios rivales de gran calibre. En la segunda ronda, debutó contra el holandés, Jesper de Jong. A pesar de perder un set, Alcaraz mostró su fuerza mental y habilidad con la raqueta para recuperarse, ganando finalmente en cuatro sets (3-6, 4-6, 6-2, 2-6). Esta victoria inicial marcó el tono de su determinación a lo largo del torneo.
En tercera ronda, se enfrentó al estadounidense, Sebastian Korda. Alcaraz dominó el encuentro desde el principio. Pero no solo eso. También, cerró el partido por la vía rápida y en tres sets (4-6, 6-7, 3-6). La solidez y precisión de su juego dejaron claro que estaba en plena forma, listo para enfrentar cualquier desafío en su camino hacia el título y seguir afrontando las siguientes rondas con las máximas garantías después de haber estado lesionado y entrenar poco en las últimas semanas.
Victorias contra algunos de los mejores tenistas del planeta
La cuarta ronda le trajo un nuevo desafío con el canadiense y finalista del Mutua Madrid Open 2024, Félix Auger-Aliassime. Alcaraz nuevamente demostró su capacidad para imponerse con autoridad, ganando en tres sets (3-6, 3-6, 1-6) y sin apenas despeinarse. Cada victoria fortalecía su confianza y consolidaba su posición como uno de los favoritos para llevarse el título.
En los cuartos de final, se enfrentó a un hueso duro de roer como es el griego, Stefanos Tsitsipas. El heleno fue un rival que no le puso las cosas nada fáciles al número tres del ranking ATP. Sin embargo, el español sacó a relucir su espíritu de lucha y su habilidad para manejar la presión. Y esto lo hizo para terminar venciendo el partido en tres sets (3-6, 6-7, 4-6). Esta victoria épica no solo le aseguró un lugar en las semifinales, sino que también demostró su capacidad para superar a los mejores del circuito. Tras esta nueva gesta le esperaba, ni más ni menos, que el tenista más en forma del momento: Jannik Sinner.
La batalla final
En las semifinales, Alcaraz se encontró con el italiano. El partido fue una verdadera prueba de resistencia y resiliencia. Todo ello hasta tal punto de llegar a extenderse a cinco sets (2-6, 6-3, 3-6, 6-4, 6-3). Alcaraz supo mantener la calma. También, ejecutar su estrategia con precisión, asegurándose un lugar en la final de Roland Garros después de conseguir derrotar a un sensacional tenista como es Sinner. De esta forma, el de Murcia hacía historia, pero quería más. Y Zverev lo esperaba en la final. El de Alemania eliminaba a Casper Ruud (6-2, 2-6, 4-6, 2-6) en su respectiva semifinal.
La final, disputada contra Alexander Zverev, fue el colofón de un torneo extraordinario. Alcaraz comenzó con fuerza, pero un despiste en el tercer set, cuando llevaba un 2-5 a favor, permitió que Zverev se llevara el set (7-5) y remontara el partido para quedar a un solo set de su primer título Grand Slam. No obstante, la presión cayó del lado del alemán y Alcaraz no se dejó desanimar. Volvió a tomar el control del partido y ganó el cuarto y quinto set (1-6, 2-6) para, al final, tocar el cielo en la capital francesa. Casi cuatro horas y veinte minutos después del inicio del partido, Carlos Alcaraz celebraba su victoria, convirtiéndose en campeón de Roland Garros (3-6, 6-2, 7-5, 1-6, 2-6) y haciendo historia a su temprana edad.
El inicio de la «era Carlos Alcaraz»
La victoria de Carlos Alcaraz en Roland Garros marca un hito significativo en su joven carrera. Con solo 21 años, ha demostrado una capacidad impresionante para competir y ganar en todas las superficies del tenis profesional. Y esto es algo que nadie ha hecho hasta el momento. Sus habilidades técnicas y mentalidad ganadora, a pesar de algunos despistes por partido, lo posicionan (si no lo es ya) como uno de los jugadores más prometedores del circuito.
Alcaraz no solo ha ganado un título de Grand Slam, el tercero en su cuenta particular, sino que ha mostrado al mundo y, sobre todo, a sus críticos, su potencial para convertirse en una leyenda del tenis. Ahora, comenzará la gira de hierba en el circuito tenístico. Con ella, vendrán torneos donde el español ya ha brillado en el pasado. Hablamos de torneos como el ATP de Eastbourne o, evidentemente, el icónico Wimbledon. Estos son lugares donde Carlos Alcaraz ya ha dejado huella y en los que, por descontado, deseará seguir marcando su nombre en cada ocasión que los pise.