Cuando un club histórico como el Valencia está dirigido como un negocio por personas que tan solo se ríen de sus aficionados, hay un problema muy gordo en el fútbol
Un presidente déspota y con aires de grandeza, que manda callar a la afición y se ríe continuamente del equipo. Ese es el tipo de persona que Meriton ha puesto a dirigir un equipo centenario como el Valencia Club de Fútbol. Una entidad herida casi de muerte.
Represalias. Eso es lo que hace esta propiedad contra aquellas personas que se hayan posicionado con Marcelino García Toral, entrenador que dio un título al Valencia ocho años más tarde. Una persona que ha terminado convirtiéndose en un santo para los aficionados pero una figura ‘non grata’ para Meriton Holdings. Ya echaron a Camarasa, histórico delegado del Valencia, que supura valencianismo a raudales. No obstante, ahora quieren seguir haciendo lo mismo. Esta vez Parejo y Coquelin.
Han faltado el respeto a uno de los capitanes más queridos de la historia del Valencia. Llegó siendo un descarte de clubes madrileños y se irá siendo una leyenda blanquinegra. Pero, parece que defender un gran proyecto deportivo pasa factura. Parejo tiene una gran amistad con Marcelino y, tal vez, sea por ello el motivo por el que se irá gratis del Valencia.
Francis Coquelin, ejemplo de constancia y garra. Un pilar dentro del vestuario che y uno de los hombres importantes del Valencia. Así como figura capital del equipo que conquistó la Copa del Rey. El perro de presa que anuló por completo a Messi y su Barça. Más Coquelin y menos Murthy, eso es lo que se necesita en Valencia.
La enésima falta de respeto de Meriton. Vender a tus dos grandes pilares, a uno de tus rivales directos, al menos hasta ahora, por una cantidad menor de la que se fichó a Thierry Correia, un jugador desconocido hasta el agosto pasado. O una cantidad mucho inferior de la que se ficharán a dos estrellitas del Oporto que igual han disputado 20 partidos en la élite entre ambos. Dos representados por Mendes, presidente casi de honor del Valencia Club de Fútbol.
Pero no se preocupen señores de Meriton, que como diría ‘Tardor’: “Els millors jugadors son aquells que saben on estan. I es deixen la pell em el camp.” Y siempre, siempre, veremos a los más grandes aquí. Lo único que importa aquí, son los jugadores que sienten el escudo como si de su vida se tratase, jugadores que se dejen todo en el terreno de juego. Porque el Valencia es como un Ave Fénix, a lo largo de toda su historia lo ha demostrado infinidad de veces.
Es la primera vez en mucho tiempo, que comienzan a acechar los fantasmas del descenso. Un dueño que no quiere poner dinero y una afición más unida que nunca. Diferencias señor Lim.
