En solo un año como entrenador del club, Antonio Conte ha vuelto a darle un objetivo al Inter de Milán: ganar la Serie A
El italiano confirmó la llegada al Inter de Milán tras una temporada de descanso, antes había dirigido al Chelsea. En Inglaterra levantó una Premier League apostando por su filosofía. Tan exitosa resultó ser su táctica en la primera temporada, que muchos entrenadores de la liga le emularon. Hasta Pep Guardiola (con un planteamiento contrario) fue capaz de adaptar la defensa de tres centrales de Conte. En su segunda temporada solo ganó la FA Cup, pero aún así pudo cimentar el proyecto que, de haber encontrado a un técnico semejante, podría haber dado muchos éxitos a los blues.
A partir de ahí, en Milán se buscaba a esa figura capaz de dar la vuelta a un proyecto con poco tiempo. Marotta firmó a Conte (con quién ya había hecho dupla DD-DT) y le dio una lista vacía, para que fuese Conte quién pidiese los fichajes. Diego Godín ya había sido confirmado, así que a priori, en la defensa estaban cubiertos. En el centro del campo, eso sí, solicitó a dos jugadores que fuesen capaces de jugar con cualquier formación; dicho y hecho, Barella y Sensi llegaron al Inter pocos días después. En la punta de ataque Conte se negó a dirigir a Icardi, una relación rota desde el comienzo, por lo que hicieron un esfuerzo y trajeron al jugador que quería Antonio: Lukaku. Llegaba tras una etapa infructuosa en Manchester y aún así, era lo que quería Conte.
Con estos refuerzos, el italiano comenzó a utilizar la 3-5-2 como formación. Había pequeñas variaciones cada partido, pero en general Conte solía apostar por ese sistema escarpado en el que cada línea debía dominar cierto tramo del partido. Este ejemplo se veía claro en el centro del campo, en el que cada jugador ocupaba una línea exacta y la cubría como si fuese la vida en ello. Los carrileros tenían un mayor despliegue en 3/4 gracias a la cobertura que hacían los centrocampistas (tapaban las bandas que dejaban libres los carrileros).
En la pizarra se puede apreciar la importancia de Lautaro Martínez arriba. Llegó como «relevo de Icardi» y ha demostrado que esa no es su posición, pero que sí es el mejor acompañante para quien sea. Lukaku habrá agradecido tener detrás al argentino, dispuesto a enviarle todos los balones que llegan. A cambio, el belga fija a los centrales cuando Lautaro esta mejor posicionado para atacar. El ex de Racing ya tenía un juego parecido, pero ha sido al llegar Conte cuando se ha destapado del todo con esta faceta.
Otro que brilla en este sistema es De Vrij. Llegó gratis al Inter y aunque no lo hizo mal, no era el mismo que había salido de Roma. Cometía más errores, dejaba correr más a los extremos, era incapaz de tapar los huecos cuando el lateral se adelantaba… Esto se corrigió cuando la defensa de tres llego al Inter. Esta temporada se ha destapado como uno de los mejores defensas de la liga, algo que ya habíamos visto en la Lazio.
El Inter disputaba a la Juventus el liderato al final de la primera vuelta, aunque aún había varias piezas que no encajaban, por lo que Marotta tuvo mucho trabajo en el mercado de invierno. Ashley Young, Víctor Moses, Christian Eriksen… La idea era cubrir esas pocas posiciones en las que aún arrastraban los problemas de la era «pre-Conte». El equipo mejoró hasta el punto de quedarse a un punto de levantar el Scudetto al terminar el campeonato. Llegar a semifinales de copa y estar aún vivos en la Europa League (semifinales). Esto hubiese sido impensable un año antes de la llegada de Conte.
Una de las características de Conte ha sido apostar por los roles y no por los nombres. Es decir, este Inter tiene grandes jugadores, claro, pero en general han destacado por cumplir con las necesidades exactas del sistema de Conte. Buen ejemplo es Lukaku, por adaptarse a la perfección al sistema del italiano. Caso contrario es el de Bastoni, quién irrumpió en mitad de temporada y mejoró por completo las prestaciones de Godín. No es que sea mejor o peor que el uruguayo, sino que en clave Inter ha dominado por completo la táctica del ex del Chelsea.