El cancerbero teutón se muestra negativamente contundente con su compostura sobre un nuevo acuerdo de renovación
El ex guardameta del Borussia Mönchengladbach tiene un contrato vigente hasta 2022 y cualquier persona que apoye al club catalán, ora por ver a Ter Stegen en las oficinas con un nuevo acuerdo para seguir vinculado al Barça. Por desgracia, dicha relación podría llegar a truncarse si la directiva actual prospera. Todo indica a que su futuro permanecerá en el aire hasta que no hayan movimientos importantes en la entidad. Hecho que mantiene el corazón de los culés en un puño.
De posible capitán a estar fuera
Ter Stegen lo tiene claro. La pésima dirección económico-deportiva que rodea al conjunto culé, hace que haya un inmenso descontentamiento desde los aficionados hasta los jugadores. Marc se postulaba como futuro capitán del combinado catalán para el próximo lustro, por su jerarquía en el césped y madurez en toma de decisiones. Junto a Leo Messi, es uno de los ídolos en la Ciudad Condal y de los futbolistas más decisivos del plantel.
El pasado curso, Ter Stegen, al igual que la mayoría del plantel, tuvo un año gris. El cambio de entrenador en pleno transcurso de temporada, las carencias defensivas y entre otros factores, no le facilitaron en absoluto cuajar actuaciones sobresalientes como acostumbra a hacer. Además, siempre se destaca su habilidad para sacar el balón jugado pero últimamente ha estado errático, hasta el punto de conceder tantos por ello. Las ocho dianas que le encajó el conjunto bávaro, tuvo como consecuencia una considerable bajada de estatus.
No obstante, en las últimas campañas Ter Stegen ha sido el encargado de salvarle los muebles al equipo en multitud de ocasiones e incluso ha llegado a aportar asistencias de gol. Actualmente, permanece en enfermería por una lesión de gravedad en la rodilla y sin lugar a dudas, es una baja muy sensible para los de Koeman.