Zidane cuenta con la plantilla definida y con una idea bastante clara de quiénes serán los actores protagonistas, pero sólo le falta la rúbrica, el esquema
Zinedine Zidane ha probado con dos esquemas totalmente distintos de inicio en las dos primeras jornadas de esta liga, y ninguno de ellos ha resultado ser del todo satisfactorio. En la primera jornada el equipo carburó, mostró una buena disposición ofensiva, pero le faltó la puntilla y no pudo marcar. En la segunda, en Sevilla, marcaron tres goles, pero el juego del equipo no convenció ni en lo defensivo ni en lo ofensivo, y este encuentro de sentimientos mete en un embrollo a ZZ.
No lo tiene fácil el francés. El entrenador se mostró satisfecho con lo que vio sobre el campo en el encuentro inaugural, pero obviamente no se puede vivir de un juego bonito o de ocasiones generadas sin premio. El balón tiene que acabar dentro, y es lo que mueve a Zidane hacia el cambio de fichas. Con LaLiga ya en juego todavía no se ha dado con la tecla.
Banda o rombo, Zizou decide
En la cabeza de Zizou existen dos principales vías: el clásico 4-3-3 o el 4-4-2 con el rombo en el centro. El primero es la carta que mejor ha jugado históricamente el francés. Extremos abiertos, con Karim en punta, y un centro del campo dominante (en el que ahora faltará Kroos por las próximas dos semanas). La vuelta de Asensio y Hazard a la lista apoyan la teoría de que este será el dibujo predominante en la temporada. El Madrid está acostumbrado a abrir mucho el campo, a explotar las bandas con extremos y laterales en zonas altas. Además, son las posiciones con mejores alternativas, Vinicius y Rodrygo son dos recambios de lujo en las alas.
El segundo es el más improbable. No le salió bien el experimento del doble delantero a Zidane, con un Jovic apático que apenas pudo mostrarse. Mayoral y Mariano tampoco parecen de la partida, al menos como titulares, por lo que la solución más sencilla es volver a las bandas. Además, la lesión de Toni Kroos resta una posibilidad en el centro, y de los 6 efectivos el Real Madrid pasa a tener 5 para 4 vacantes. No parece rentable.
A su vez, hay ciertos jugadores clave para que Zidane acabe decantándose por un esquema u otro. El Real Madrid cuenta con cuatro jugadores de banda (los ya mencionados Hazard, Asensio, Rodrygo y Vinicius), quienes se quedarían sin sitio en caso de que el rombo saliese adelante. Estos futbolistas son los que harían que Zidane deje de lado la idea de que Jovic y Benzema jueguen juntos, una idea que dijo ser posible en la rueda de prensa anterior al encuentro ante el Betis, pero que ese mismo partido certificó no ser demasiado beneficiosa. La competición avanza y Zidane debe completar el puzzle, que pasa por las bandas.