Tras un verano en el que el Valencia Basket ha realizado un gran esfuerzo con fichajes, se comienza a poner en duda la valía de Ponsarnau
El entrenador del Valencia Basket está generando una serie de dudas en los aficionados. E incluso la directiva y algún jugador ha podido llegar a pensar en la destitución de Ponsarnau. Una plantilla de alto calibre que no está llegando a los niveles esperados.
Ponsarnau lleva desde 2016 ligado a la entidad valencianista. Primero como ayudante de Pedro Martínez, uno de los entrenadores con mayor currículum en la historia del Valencia Basket. Y, después en el 2017, siguió como ayudante, pero en esta ocasión con el Valencia a los mandos de Txus Vidorreta.
Pero, cuando se decidió prescindir de los servicios de este último, Txus Vidorreta, se confió en un hombre de la casa, y con experiencia. Jaume Ponsarnau. Su primera temporada llegó a tocar la gloria. El Valencia Basket se proclamó campeón de la Eurocup, tras mucho tiempo sin levantar un título continental. Además, la pasada temporada, con la famosa burbuja de la ACB, lograron clasificarse a semifinales del torneo. Eliminando, entre otros, al Real Madrid. Pero el Baskonia apeó a los de Ponsarnau en su propia casa.
No obstante, el inicio de la nueva temporada está dejando algunas dudas en territorio Taronja. A pesar de las victorias en el inicio de liga y en la primera jornada de la Euroliga, las sensaciones no son positivas. Y, sobre todo, tras la derrota frente al Coosur Real Betis, en Sevilla, alguna voces autorizadas comenzaron a pedir la cabeza de Ponsarnau.
Se han fichado a grandes jugadores, como al ex NBA Derrick Williams. A uno de los mejores jugadores de la ACB, Klemen Prepelic. Asimismo, se ha incorporado también a Martin Hermannsson, procedente del Alba de Berlín alemán. Así como Nikola Kalinic y el joven Jaime Pradilla. Además, tras la lesión de Sastre se ha recuperado a Josep Puerto de su cesión.
Ante tal magnitud de plantilla y fichajes, a Ponsarnau se le exige una mayor efectividad defensiva. No puede ser que sea tan fácil meter 95 puntos a un Valencia Basket con tal cantidad de estrellas. Básicamente porque sino no se puede aspirar a ganarlo todo, que es lo que debería ser objetivo principal para esta plantilla. Obviamente se pueden perder partidos, pero hay que tener una defensa más férrea. Y eso es cuestión de trabajarlo.