Rafa Guerrero y Mejuto González protagonizaron una de las actuaciones arbitrales más recordadas de la historia del fútbol español
Zaragoza, La Romareda, 29 de septiembre de 1996. Hace casi ya 25 años. Corría el minuto setenta cuando todo el mundo puso los ojos sobre el colegiado, Mejuto González, y el linier, Rafa Guerrero.
Contexto del partido
Por aquel entonces el Real Zaragoza era un equipo competitivo que peleaba de tú a tú los partidos. Se consideraba como uno de los equipos más grandes de España. El FC Barcelona a su vez también era uno de los mejores equipos de la Liga.
El encuentro entre Real Zaragoza y Barcelona se correspondía a la quinta jornada de Liga. Los maños tenían 5 puntos habiendo logrado una victoria, dos empates y dos derrotas situándose decimoctavo. El club catalán llegaba invicto ganando cuatro de los cinco encuentros y sumando un empate consiguiendo en su casillero 13 unidades y siendo líder de la clasificación.
Se partido se había ido desempeñando con total normalidad. Los blanquillos vencían 2-1 cuando el colegiado decretó el descanso. Los goles de Poyet y Luis Enrique en propia puerta daban ventaja y neutralizaban el tanto Luís Figo.
Nada más salir de vestuarios, Gustavo López anotó el tercero para los locales. Siete minutos después Ronaldo recortaba distancias en el marcador y ponía en el luminoso el 3-2.
Llegó la polémica
Falta a favor del FC Barcelona. Ahora con el VAR todo hubiera sido más fácil, expulsión a Couto y Solana. En ese momento en el que el estadio y los jugadores creaban un ambiente de presión, ésta superó a los colegiados.
El barullo en el área era total. Juanmi, portero del Real Zaragoza, atrapaba el balón sin mayor peligro. Inmediatamente, Couto daba una patada por detrás a Xavi Aguado. En reacción a esto, y mientras el guardameta sacaba, Solana, número 3 arreaba un manotazo a Couto.
La charla entre Mejuto y Rafa Guerrero
Rafa Guerrero levanta el banderín y Mejuto pita, en ese momento se dirige a hablar con su linier. La conversación parece un tanto confusa. Ya comenzamos con el «Penalti y expulsión» que Rafa le asegura a Mejuto. A esto, el colegiado le contesta «Vaya, joder Rafa, me cago en mi madre y, ¿expulsión de quién?».
Como hemos podido ver en ningún momento se produce el «Rafa no me jodas». Rafa Guerrero le contesta afirmando que es el del número 6, pero le deja caer que lo revise con su compañero de la otra banda para asegurarse.
Rafa vuelve a afirmar que le da un golpe en cabeza por detrás refiriéndose a Aguado. En realidad el que dio el manotazo a Couto fue Soalana, el número, 3. Le volvía a preguntar Mejuto al linier quien había acometido la acción y de nuevo la respuesta iba a ser el número 6.
Durante cerca de dos los dos minutos que se tardó en tomar la decisión se pudieron oir todo tipo de comentarios. Desde «Dedícate a levantar el banderín y no a expulsar» o «Si pita penalti nos vamos del campo».
La decisión terminó siendo errónea. Expulsó a Aguado y decretó penalti favorable para el FC Barcelona. La pena máxima fue anotada por Popescu y después de esta acción el Real Zaragoza ya no pudo reponerse. Los posteriores goles de Luis Enrique y Ronaldo sentenciaron el partido y dieron la victoria a los culés por 3-5.
Esa noche La Romareda fue presente de una de las acciones arbitrales que más polémica generó dentro del fútbol español. No pudieron hacer nada y para todos los zaragocistas, esa acción quedó grabada a fuego en la memoria.
