Después de su segundo puesto en Hungría y la novena plaza de Max Verstappen, el británico es el nuevo líder del campeonato
Está siendo una temporada apasionante de F1. Este año y por primera vez en varias temporadas, los aficionados de la Fórmula 1 pueden estar contentos en cuanto a espectáculo y competitividad se refiere.
Y no sólo por la trepidante batalla por el título que protagonizan Lewis Hamilton y Max Verstappen, que también, sino por las carreras que están albergando los circuitos del Gran Circo.
En el Hungaroring vivimos una carrera completamente surrealista, con unos resultados muy distintos a los que se suelen ver. Basta con ver el ganador del Gran Premio: Esteban Ocon. El piloto francés suma la primera victoria de su vida en su palmarés y por primera vez en más de 10 años, la marca Renault logra alzarse en lo más alto del podio.
Max Verstappen, damnificado
En el Gran Premio de Gran Bretaña no pudo ni terminar la primera vuelta debido a su famoso accidente, desencadenando toda la polémica con Hamilton y Mercedes. En Hungría tampoco le dejaron rodar ni un giro tranquilo. Bottas jugó a los bolos en la salida, provocando un tremendo accidente que se llevó por delante las posibilidades de correr el GP de muchos pilotos.
Max pudo seguir después de la bandera roja, a diferencia de su compañero de equipo, Checo Pérez, golpeado directamente por el piloto finlandés. Sin embargo, las condiciones del coche no eran óptimas y no pudo marcar buen ritmo en ningún momento. Bastante tuvo con lograr rodar 70 vueltas con el coche roto, perdió el liderato en Hungría, pero esos dos puntos que logró pueden saber a oro a largo plazo.
Hamilton, beneficiado
El piloto británico salía primero después de su jugada el sábado. El accidente lo dejó primero destacado y con todos sus adversarios (a nivel de rendimiento del monoplaza) fuera de la carrera. Parecía que estaba hecho para el piloto de Mercedes y después de la bandera roja, los aficionados esperaban una de las victorias más placenteras de Lewis en la temporada.
Pero, sin embargo, llegó el error de Mercedes, que hizo que Hamilton protagonizará una de las imágenes más extrañas de la historia de la competición: salió solo. Después paró y se puso en modo remontada. En los primeros compases le costaba acercarse a los demás monoplazas y en rendimiento del neumático no era óptimo. Sin embargo, en su parada de mitad de carrera logró reencontrarse con el trazado y con el conjunto medio empezó a sacar un ritmo muy rápido.
Alonso sazona el mundial de pilotos
Es imposible entender el resultado de la carrera sin el componente de Fernando Alonso. El asturiano protagonizó una de sus mejores carreras en la F1, la mejor desde su vuelta sin duda, y le será recordada por su increíble batalla con Hamilton.
Desde el box de Mercedes animaban a su piloto, argumentando que podía ganar la carrera. El ritmo de Lewis parecía suficientemente bueno como para remontar hasta ponerse primero, pero el Alpine de Alonso lo frenó en seco, y cuando el británico le superó, ya no habían vueltas suficientes para alzarse con la victoria del GP.
La actuación de Fernando sirvió para que Ocon lograra su primera victoria en la F1, pero también para apretar el Mundial. La descalificación de Vettel le da más puntos a Hamilton pero también uno más a Verstappen.
El Mundial en un puño
El caso es que escasos puntos separan a los dos pilotos aspirantes al título pese a la accidentada carrera en Hungría. Alonso es una pieza importante de que nos vayamos al patrón veraniego con menos de 10 puntos de diferencia entre Verstappen y Hamilton.
El próximo GP, además de Bélgica, lo alberga el circuito de Zandvoort, Holanda. La casa de Max Verstappen será uno de los primeros escenarios en encender los semáforos en una segunda parte de la temporada que promete ser tan emocionante como la primera.
Hamilton lidera, pero por poco, y Verstappen viene con hambre y tiene un circuito marcado en el calendario. Ante su gente, en su país, y después de dos carreras accidentadas. ¿Qué mejor escenario para quitarse la espina de Silverstone y Hungaroring?
