El considerado pionero provocó un antes y un después en la historia de España en Fórmula 1
La Fórmula 1 jamás había sido un deporte en el que los españoles triunfaran. Con la clara excepción de Alfonso de Portago, primer español en lograr un podio en la categoría y en pilotar para Ferrari, España nunca había tenido demasiada importancia en el gran circo. Lo único que relacionaba al país con la Fórmula 1 era el GP de España, que se disputaba en los primeros años y décadas de competición en el Jarama o en Montjuic.
En este complicado contexto, Adrián Campos aterrizó en la categoría después de ser el primer español que quedaba entre los tres primeros en un campeonato internacional de Fórmula 3. Después de pasar por la Fórmula 3000 y de colaborar esporádicamente con Tyrrell F1, Campos fichó por Minardi en 1987 para ser piloto titular en la Fórmula 1.
Su andadura como piloto no fue brillante. En un Minardi muy poco competitivo firmó un decimocuarto puesto como mejor resultado en su primera temporada. Al año siguiente, después de no poder clasificarse para las carreras de Mónaco, México y Canadá, Minardi decidió despedirle en favor Pierluigi Martini. Así pues, el español se retiró en 1988 de la Fórmula 1 para irse a competir al Campeonato de España de Superturismos unos años más.
El comienzo de su obra
Después de su retiro como piloto, fundó junto a Jean François Mosnier su propia escudería de Fórmula 1, Bravo F1. Sin embargo, el repentino fallecimiento de su socio hundió económicamente el proyecto, por lo que no se llevó a cabo.
Su famosa escudería Campos Racing la fundó en 1998, pero empezó con el nombre de Adrián Campos Motorsport. El equipo comenzó su andadura en la Fórmula Nissan mientras Adrián atraía a jóvenes talentos españoles que venían destacando desde el karting. Así pues, la escudería salió campeona de la Fórmula Nissan en varias ocasiones de la mano de pilotos como Antonio García, Marc Gené o Fernando Alonso. Esta confianza en el producto nacional fue lo que hizo grande a Adrián Campos.
Después de años en Fórmula Nissan y en Fórmula 3 dando oportunidades a multitud de jóvenes pilotos españoles como Sergio Hernández, Roldán Rodríguez o Álvaro Barba, el equipo pegó el salto a la GP2 y se comenzó a llamar Campos Racing. Además, la estructura Campos también mantuvo su escudería en la Fórmula 3 española.
Con su equipo presente en multitud de categorías de monoplazas, Adrián Campos siguió dando asiento a los pilotos españoles que iban destacando. Además, por su equipo también han pasado pilotos extranjeros que han acabado en la Fórmula 1 como es el caso de Vitaly Petrov, Lucas di Grassi, Rio Haryanto, Alexander Rossi o, incluso, Lando Norris, que estuvo en Campos en 2017 en las dos últimas carreras del campeonato.
El automovilismo español le debe mucho
Su fallecimiento este mismo año conmocionó al mundo del motor, sobre todo en España. Gracias a él hemos podido ver a españoles luchando por grandes logros en la Fórmula 1. Su influencia y formación a los más jóvenes ha hecho que se le considere como un pionero del automovilismo en España.
Él le dio asiento a Fernando Alonso en sus inicios, único campeón español de la Fórmula 1 en la historia. En la GP3, también tuvo en su equipo al flamante campeón de la Indycar Álex Palou, primer y único ganador español de la competición americana. Este fue el último gran descubrimiento de Adrián Campos. El pionero tenía razón: Álex es muy bueno. Él se ha ido pero su legado seguirá presente. Campos Racing seguirá con la labor de su creador, esperemos, por mucho tiempo más.