El británico ganó una carrera surrealista que tuvo dos banderas rojas y mucha polémica entre los dos aspirantes al título
Hamilton y Verstappen llegarán a Abu Dhabi con los mismos puntos en su casillero. Después de una carrera que tuvo de todo tanto en la pista como en los despachos, el británico se llevó la victoria por delante de su máximo rival, demasiado inconsciente en esta ocasión. Bottas completó el podio después de arrebatarle la tercera posición a Ocon en recta de meta. La carrera se le escapó de las manos a la FIA y acabó siendo despropósito.
La prueba se mantuvo tranquila en las diez primeras vueltas. Los líderes mantenían posición después de una salida muy conservadora mientras los españoles iban recuperando posiciones. Alonso empezó bien pero se fue diluyendo con el paso de las vueltas, mientras que Carlos, con duro desde el inicio, iba remontando.
El primer momento interesante de la prueba vino como consecuencia del fuerte accidente de Mick Schumacher. El safety car salió a pista y Verstappen no paró, pero sí los dos Mercedes. Red Bull estaba viendo que Max no estaba siendo capaz de atacar a Bottas, por lo que probaron con algo diferente. Al final, les salió perfecto. El accidente acabó siendo de bandera roja porque las protecciones quedaron dañadas. Así pues, a Verstappen se le permitió cambiar neumáticos siendo líder. Habían ganado la puesta.
En la resalida, se montó el lío. Hamilton salió mucho mejor y le ganó la posición a Verstappen, pero este se fue largo y cortó la curva 2, volviendo a pista de manera peligrosa y provocando una montonera de coches que acabó en un fuerte accidente. Checo, Mazepin y Russell se quedaron fuera y salió otra bandera roja. El que mejor aprovechó la jugarreta de Verstappen fue Ocon, que se puso segundo detrás del holandés.
En la bandera roja llegaría el culebrón del día. Después de unas surrealistas “negociaciones” de la FIA con Red Bull, se determinó que Verstappen saldría tercero en la nueva resalida, con Ocon primero y Hamilton, segundo. Es decir, el mismo orden que cuando llegó la bandera roja pero con Verstappen devolviendo las dos posiciones.
Poco le importó al holandés. En una salida espectacular, se volvió a colocar líder de la carrera después de un espectacular paralelo de tres coches en la primera curva. Hamilton se quedó detrás de Ocon pero le adelantó en recta de meta. El hándicap de Verstappen era que llevaba neumáticos medios, mientras que su rival iba con duros, siendo su sombra y marcando vueltas rápidas.
A partir de aquí, la carrera fue un festival de toques y trozos de fibra de carbono esparcidos por todo el circuito que provocaron algún que otro virtual safety car. Alonso se quejaba de estas peligrosas condiciones buscando que saliera el coche de seguridad, pero Michael Masi siguió insistiendo en el virtual. Todo esto le estaba viniendo genial a Verstappen, ya que podía dosificar sus neumáticos medios para llegar hasta el final.
Después de uno de los virtual safety car, llegó el primero de los muchos roces de los dos aspirantes al título. Hamilton le metió el coche en la curva 1 pero Verstappen le echó a los exteriores de la pista. La FIA le obligó a cederle la posición a Hamilton por ese movimiento pero el holandés lo hizo de forma peligrosa y Hamilton le embistió por detrás. El británico se quejaba de un brake test, y es que Verstappen llegó a pisar el freno en una zona de alta velocidad. El alerón del Mercedes estaba tocado, pero no se resintió en ritmo.
Después de muchas comunicaciones de la FIA con ambos equipos, Verstappen le cedió de nuevo la posición a Hamilton, pero le devolvió el adelantamiento. Mercedes se siguió quejando y, esta vez, Max le dejó pasar definitivamente. Además, la FIA le sancionó con 5 segundos por volver a pista de forma insegura en la acción del adelantamiento anterior.
Por detrás, Ocon y Bottas se estaban disputando el último escalón del podio. Después de una defensa brutal del francés, Bottas acabó adelantándole en recta de meta en un auténtico photo finish.