A falta de siete jornadas, el Girona se empieza a plantear si el ascenso directo es una utopía o si realmente se puede alcanzar
Tras la derrota en Zaragoza (1-0), el Girona perdió muchas opciones para subir directamente a Primera División sin tener que disputar el playoff de ascenso. En Montilivi, se preguntan si el ascenso directo empieza a ser una utopía.
El conjunto de Michel es quinto con 58 puntos, ocho menos que el Almería (segundo clasificado) y cinco más respecto al Las Palmas (séptimo clasificado).
Esta semana, los catalanes reciben a la Real Sociedad “B”, conjunto situado en puestos de descenso, mientras que Valladolid y Almería se ven las caras.
La clave
Sin embargo, para luchar por el ascenso directo, el Girona tiene que amarrarse a la mejor versión de sus pilares fundamentales, que tantos buenos resultados le han dado esta temporada.
Se trata de jugadores como Álex Baena o Samu Saiz. Jugadores que han bajado un poco el rendimiento en las últimas jornadas. Ambos, junto a nombres como los de Aleix García o Borja García, deben echarse el equipo a la espalda durante este tramo final de temporada.
Por otro lado, Cristhian Stuani también debe recuperar su olfato goleador.
Las opciones
Los rojiblancos tienen muy complicado no evitar el playoff de ascenso para estar en la máxima categoría del fútbol español. Aun así, en la Liga Smartbank, 21 puntos en juego son muchos, y más con un Girona experto en los finales de temporada.
La temporada pasada, con Francisco en el banquillo, los catalanes lograron 22/24 en las últimas ocho jornadas de liga.
Es así que, la primera final de las siete que le quedan al Girona se disputa en Montilivi este lunes a partir de las siete de la tarde, donde los locales reciben al filial de la Real Sociedad.