El central catalán, relegado al puesto de cuarto central, ha visto notablemente reducida su participación respecto al curso pasado
Eric García ha dejado de ser imprescindible en el Barcelona. El defensa catalán, titular indiscutible el curso pasado, ha visto reducido su estatus hasta el puesto de cuarto central. De los últimos siete partidos solo ha sido titular en uno, frente al Intercity en Copa del Rey. Por si fuera poco, la irrupción de Marcos Alonso en el eje de la zaga amenaza con relegarle a un papel mucho más ocasional.
El buen hacer de sus compañeros ha sido vital en este cambio de rol. Araújo, Koundé y Christensen han dado una solidez al equipo brutal y, fruto de ello, el Barcelona solo ha encajado seis tantos en liga. Sus bajas coincidieron con el bajón azulgrana en octubre y noviembre y la consiguiente eliminación en fase de grupos de la Champions League.
Sus desafortunadas actuaciones en días señalados tampoco han ayudado. Su falta de contundencia frente a Lautaro propició la remontada del Inter en el Camp Nou y en el Bernabéu frente al Real Madrid salió en la foto de los tres goles. Su nivel está muy lejos del que necesita un club como el Barcelona.
Xavi, a pesar de todo, sigue confiando en él. El técnico de Terrassa así lo mostró en la rueda de prensa previa al duelo copero frente al Intercity: “Siempre es útil y lo ha sido. Ha hecho grandes partidos con nosotros. Para mí es una garantía, tengo mucha confianza en él“. Ahora es el propio Eric quien debe devolverle esa confianza sobre el verde.
Arteta lo quiere en el Arsenal
La falta de minutos de Eric García ha despertado el interés de varios clubes por hacerse con sus servicios, entre ellos el, Arsenal. Mikel Arteta quiere al central catalán de vuelta a Inglaterra, donde ya estuvo en el Manchester City, club en el que ambos coincidieron cuando el vasco era ayudante de Guardiola. Sin embargo, el de Martorell lo tiene claro: quiere luchar por hacerse un hueco en el conjunto azulgrana. Lo tiene en su mano, pero antes debe subir su nivel. En el Barcelona no juega cualquiera.
