En 2010 el Internazionale Milano se sumó al selecto club de equipos que han logrado ganar liga, copa y competición continental en el mismo curso.
El entrenador portugués José Mourinho llegó en junio de 2008 al Inter de Milán, después de ser despedido meses antes por el Chelsea FC inglés. En su primera campaña dejaría algunos de los indicios que mostraría el año siguiente ganando el Scudetto. La temporada siguiente lideraría de forma magistral a un equipo que sorprendió a toda Europa, tanto por el talento individual de sus jugadores como el del equipo en conjunto.
‘The Special One’, como solían llamarle en Inglaterra, salía de inicio de la siguiente forma: Júlio César ocupaba el arco, dónde se consolidó para unos cuantos años más gracias a sus grandes actuaciones, ya desde años atrás. En defensa, Maicon y Chivu actuaban en los costados derecho e izquierdo, respectivamente, y tenían a Lúcio y Walter Samuel de escuderos. En el doble pivote del cuadro ‘nerazzurro’ la leyenda milanista Javier Zanetti acompañaba a su compatriota argentino Cambiasso, formando una dupla más que sólida. Adelantado, Wesley Sneijder era el enganche de calidad que proporcionaba a las tres bestias con las que contaba el Inter en la parte delantera. Pandev, Samuel Eto’o (reciente campeón de todo con el Barça) y Diego Milito eran los tres artilleros de lujo de los que el Giusseppe Meazza pudo disfrutar a principios de la década.
El año no empezó de la mejor manera para la ‘Beneamata’, ya que el Lazio les arrebató el primer título en juego, la Supercoppa Italiana. Pero supieron levantarse y en la segunda jornada de la Serie A vencieron por un contundente 0-4 a su eterno rival y vecino, el AC Milan. Pronto se asentaron en los primeros puestos ligueros. Sin embargo la Champions League no les sonrió de la misma manera, empataron los tres primeros partidos de la competición. Justo al comienzo de la segunda vuelta de la liguilla, el Dinamo de Kiev pondría contra las cuerdas a los italianos. Un gol del ‘killer’ Shevchenko daba ventaja a los locales, que acabaron siendo remontados en los últimos minutos con sendos goles de Milito y Sneijder, pero que les metieron el miedo en el cuerpo al dejarlos eliminados durante varios minutos. Después de ser derrotados por el FC Barcelona, el Inter tuvo que doblegar al Rubin Kazan ruso para poder clasificarse a octavos de final.
Con la clasificación sellada en la máxima competición europea el Inter consiguió afianzar su liderato en la liga con una buena racha de imbatibilidad durante las jornadas 7 y 27, que sólo la derrota en Turín ante la Juventus manchó. El propio club turinés fue al que tuvieron que eliminar para plantarse en las semifinal de la Coppa d’Italia (no sin antes doblegar al Livorno en octavos).
En el comienzo del ‘knockout’ de la Champions League el Chelsea fue el equipo que se interpuso en el camino del Inter. El destino quiso que Mou se vengara de su ex-equipo tras ser destituido. En la ida en Milán los locales se adelantaron pronto con un gol ajustado al palo de ‘El Príncipe’ Milito. Nada más empezar el segundo tiempo Kalou pondría las tablas de nuevo, pero Cambiasso con un fuerte disparo consiguió batir a Petr Cech para cerrar el marcador y dar ventaja al cuadro milanista de cara al partido en Londres. En Stamford Bridge fue el Chelsea quien dominó y sometió a su rival en la primera parte, pero después del descanso el Internazionale cogería las riendas y Eto’o sentenció la eliminatoria en el 77’. En la siguiente ronda consiguieron batir al CSKA Moscú por 1-0 y 0-1, muy ajustado, y recibirían su pase a las semifinales.
Mientras, la Serie A fue poniéndose más apasionante con el paso de las jornadas, y es que una racha de tropiezos interistas acercó al AS Roma al líder a un punto de distancia, perdiendo justamente contra ‘La Loba’. A su vez, lograron colarse en la final copera tras eliminar a la Fiorentina y una semana después de su pase, Inter de Milán y Barça volvieron a verse las caras, esta vez con todo en juego. El duelo en Italia lo abrió Pedro para adelantar al conjunto culé en el minuto 19. Poco después Sneijder lo empataría y Maicon tras una buena contra de su equipo remontó. El gol de Milito cerraría el partido ante un Barcelona que no se rindió pero que no consiguió superar a la bien organizada defensa de Mourinho. En la vuelta, los catalanes sólo fueron capaces de anotar un gol, insuficiente para completar la hazaña.
Antes de disputar su primera final de la Copa de Europa en los últimos 38 años, el Inter se tuvo que medir a la Roma de Claudio Ranieri en la final de copa. Diego Milito les daría la victoria y el primer título de la temporada a los nerazzurros. No pudieron afianzar el triunfo en liga hasta la última jornada, a la que llegaron con dos puntos de ventaja sobre los romanos. Su victoria por 0-1 ante el Siena con gol, una vez más, de Milito les daría la segunda corona del año, esta vez en la Serie A, donde ganaron 24 partidos, empataron 10 y perdieron otros 4, suficiente para ser campeones por segundo año consecutivo.
La final de Madrid ante el Bayern de Múnich fue el segundo evento futbolístico más grande del año, detrás del Mundial que se celebraría en Sudáfrica. El 22 de mayo de 2010 el conjunto bávaro y los italianos protagonizaron una final memorable, llena de ocasiones para ambos. Milito sería quien puso por delante a los suyos en el 34’ tras una gran cabalgada del holandés Sneijder. Ambos equipos se volcaron en las áreas rivales pero tanto Butt como Júlio César estuvieron brillantes en su trabajo. Milito volvería ser decisivo en el 70’ con un golazo para sentenciar el partido y ganarse el cariño de Milán.
Así fue como el Inter se convirtió en el sexto equipo en la historia en conseguir un triplete, después de Celtic de Glasgow (1967), Ajax de Ámsterdam (1972), PSV Eindhoven (1988), Manchester United (1999) y FC Barcelona (2009). Fue el último curso de Mou como entrenador del club antes de marcharse al Real Madrid, dejando una huella imborrable que será difícil de igualar para las próximas generaciones.
